Sao Paulo, 29 may (EFE).- La economía brasileña, la mayor de América Latina, se contrajo un 0,2 % en los tres primeros meses del año respecto al último trimestre de 2014, según los datos divulgados hoy por el Gobierno.
La reducción del producto interior bruto (PIB) brasileño de enero a marzo fue del 1,6 % si se compara con los tres primeros meses de 2014, mientras que en el acumulado de los últimos doce meses cayó un 0,9 %, de acuerdo con el informe del estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
La desaceleración de la economía en los tres primeros meses del año con respecto al último trimestre de 2014 estuvo motivada en gran parte por la contracción de la actividad industrial (-0,3 %) y del sector servicios, que se redujo un 0,7 %.
El instituto estatal también calculó una caída del 1,5 % en el consumo de las familias, que era hasta hace pocos meses el principal motor de la economía brasileña.
El consumo viene cayendo perjudicado en los últimos meses por el aumento de la inflación, la restricción del acceso al crédito, la subida de los tipos de interés y la pérdida de confianza ante el escenario económico.
De acuerdo con el IBGE, el gasto del Gobierno, que anunció un recorte de 69.946 millones de reales (23.315 millones de dólares) en su presupuesto de este año para ajustar sus deficitarias cuentas, se redujo un 1,3 % en el período.
La actividad agropecuaria fue la única que consiguió esquivar el terreno negativo y creció un 4,7 % de enero a marzo.
El resultado del primer trimestre confirma los pronósticos de los analistas, que esperan para este año una contracción de la economía tras la fuerte desaceleración del año pasado.
El PIB de Brasil avanzó el año pasado un tímido 0,1 %, frente a la expansión del 2,7 % registrada en 2013 y el crecimiento del 1 % de 2012, y según las previsiones del Gobierno la economía se contraerá un 1,2 % este año.
Si se confirman los pronósticos, ahora avalados por el propio Gobierno, la economía brasileña tendrá en 2015 su peor resultado desde 1990, cuando registró una caída del 4,35 %.
A pesar del crecimiento negativo, el Ejecutivo de la presidenta Dilma Rousseff continúa defendiendo el plan de ajuste fiscal lanzado para equilibrar las maltrechas cuentas públicas, las cuales registraron en 2014 el primer saldo negativo en 13 años.
Según el Gobierno, el esfuerzo fiscal permitirá que la economía comience a mostrar una recuperación en el segundo semestre de este año.