Por Marius Zaharia
LONDRES (Reuters) - La rentabilidad de los bonos de la zona euro se acercaba el lunes a mínimos históricos después de que Standard & Poor's recortara el rating de Finlandia y bajara a negativa la perspectiva de calificación de Francia, dos decisiones que se sumaron a las preocupaciones sobre la economía mundial.
La decisión de S&P llegó a última hora del viernes, al final de una semana cargada de malos datos económicos en la zona euro y en la que el Fondo Monetario Internacional revisó sus previsiones mundiales de crecimiento por tercera vez este año.
Los inversores consideran las peores calificaciones otro argumento para que el Banco Central Europeo introduzca más medidas de alivio monetario, potencialmente comprando grandes cantidades de deuda pública, dejando a un lado las preocupaciones sobre la solvencia a largo plazo.
"Es importante hasta cierto punto pero no pondría mucho énfasis en los ratings", dijo Aliki Papasteriou, analista de inversión de Nedgroup Investments. "Si vemos un deterioro mayor, esperaría algo de acción del BCE".
La rentabilidad del bono alemán a 10 años, la referencia para los costes de endeudamiento de la zona euro, cayó un punto básico al 0,88 por ciento, justo por encima del mínimo de la semana pasada de 0,859 por ciento.
La calificación de Standard & Poor's para Francia sigue siendo AA, pero revisó el viernes la perspectiva a negativa, debido a dificultades de llevar a cabo reformas y un presupuesto poroso.
El mismo día, Finlandia - uno de los últimos países de la zona euro con máxima calificación - perdió su triple A deS&P. La agencia citó riesgos de un estancamiento económico prolongado debido al envejecimiento de la población y una fuerza laboral menguante.
Helsinki ha sufrido otro revés económico este año por las sanciones comerciales que Moscú y Occidente se impusieron entre sí, que han dañado el comercio con Rusia, uno de sus principales socios comerciales.
La rentabilidad del bono francés y finlandés apenas varió al 1,25 y al 1 por ciento, respectivamente, no lejos de sus mínimos históricos.
"Mientras los mercados esperan que el BCE compre deuda pública, las rebajas de calificación, en concreto del mejor o segundo mejor miembro de la zona euro por calificación podría no ser ... (negativo) para el mercado de bonos", dijo Marius Daheim, director de estrategia de Bayerische Landesbank.