Los mercados bursátiles asiáticos mostraron fortaleza el lunes, ya que los inversores anticipaban decisiones de los bancos centrales que podrían conducir a nuevos recortes de tasas, y los datos de inflación de EE.UU. esperados para esta semana podrían señalar una relajación monetaria adicional.
El Banco Popular de China (PBOC) redujo inesperadamente su tasa repo a 14 días en 10 puntos básicos, lo que impulsó a las acciones blue chip chinas, llevando a un aumento del 0,5%.
La reducción por parte del PBOC sorprendió después de que optara por no recortar las tasas a largo plazo anteriormente, lo que inicialmente había decepcionado a los mercados. Esta medida se interpreta como una señal de la disposición del banco central para apoyar la economía.
Con Japón observando un día festivo, los volúmenes de negociación fueron más bajos, pero el índice más amplio de acciones de Asia-Pacífico del MSCI, excluyendo Japón, aún subió un 0,2%. Esto siguió a una ganancia del 2,7% de la semana anterior. Aunque el Nikkei estaba cerrado, sus futuros cotizaban al alza en 38.530, por encima del cierre en efectivo de 37.723, continuando el impulso alcista del rally del 3,1% de la semana pasada.
En Europa, los futuros del EUROSTOXX 50 subieron un 0,3%, y los futuros del FTSE vieron un modesto aumento del 0,1%. Los futuros de las acciones estadounidenses también apuntaban a un inicio positivo, con los futuros del S&P 500 subiendo un 0,3% y los futuros del Nasdaq aumentando un 0,5%.
El S&P 500 ha experimentado una ganancia del 1% en septiembre, un mes que típicamente es débil para las acciones, y ha subido un 19% en lo que va del año, alcanzando máximos históricos.
La actividad de negociación en las bolsas de EE.UU. fue notablemente alta el viernes, con más de 20.000 millones de acciones negociadas, marcando la sesión más activa desde enero de 2021.
Este aumento en la actividad sigue al reciente recorte de medio punto en la tasa de la Reserva Federal, con los futuros ahora indicando un 50% de probabilidad de otra reducción significativa de la tasa en noviembre.
Las declaraciones del economista de Barclays, Christian Keller, destacaron la naturaleza inusual del movimiento agresivo de la Fed para recortar las tasas en 50 puntos básicos sin una crisis financiera inminente o pérdidas de empleos, subrayando la determinación de la Fed de mantener condiciones favorables en el mercado laboral.
La semana que viene está repleta de varios responsables de políticas de la Reserva Federal programados para hablar, incluyendo al presidente Jerome Powell, dos gobernadores y el presidente de la Fed de Nueva York, John Williams. Los inversores estarán atentos al índice de gastos de consumo personal (PCE) básico que se publicará el viernes, que es el indicador de inflación preferido de la Fed. Los analistas predicen un aumento del 0,2% mes a mes, con un ritmo anual esperado del 2,7%, y se anticipa que el índice general se desacelere al 2,3%.
Otros bancos centrales también están en el punto de mira, con el Banco Nacional Suizo que se espera que recorte las tasas en un cuarto de punto al 1,0% el jueves, y una probabilidad del 41% de una reducción de 50 puntos básicos. Es probable que el banco central sueco relaje en 25 puntos básicos en su reunión del miércoles. En contraste, se proyecta que el Banco de la Reserva de Australia mantenga su tasa en 4,35% durante la reunión del martes debido a la persistente inflación.
Mientras tanto, en EE.UU., la atención se centra en las negociaciones para prevenir un cierre del gobierno, ya que la actual financiación de 1,2 billones de dólares expira el 30 de septiembre. El presidente de la Cámara de Representantes republicano, Mike Johnson, ha propuesto un proyecto de ley de financiación provisional de tres meses, que requerirá una votación.
En los mercados de divisas, el dólar se ha fortalecido a 144,35 yenes, tras un repunte del 2,2% la semana anterior. El euro también tuvo un buen desempeño, ganando casi un 3% la semana pasada y manteniendo su posición frente al dólar en 1,1160 dólares.
La próxima elección de liderazgo del PLD de Japón el 27 de septiembre, donde se elegirá un nuevo líder para reemplazar al primer ministro saliente Fumio Kishida, también está en el foco de atención.
En cuanto a las materias primas, los precios del oro se mantuvieron altos en 2.620 dólares la onza, justo por debajo del pico récord de 2.625,59 dólares. Los futuros del oro Comex vieron las posiciones netas largas alcanzar un máximo de cuatro años la semana pasada, lo que indica un posible retroceso a corto plazo.
Los precios del petróleo continuaron firmes, con el crudo Brent sumando 40 centavos a 74,89 dólares por barril, y el crudo estadounidense subiendo 39 centavos a 71,39 dólares por barril, impulsados por las esperanzas de que los costos de endeudamiento más bajos apoyarán el crecimiento económico global y la demanda de combustible.
Reuters contribuyó a este artículo.
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