Por David Stanway
SHANGHÁI, 21 nov (Reuters) - Las emisiones de gases de efecto invernadero de China han disminuido desde el año pasado, pero aún no han alcanzado su punto máximo, y las políticas del país aún no están totalmente alineadas con los objetivos a largo plazo para limitar el aumento de la temperatura, según un informe de investigación publicado el lunes.
China produce casi un tercio de las emisiones anuales de carbono del mundo, y su éxito en el cumplimiento de sus objetivos climáticos "es posiblemente el factor más importante en la lucha mundial contra el cambio climático", afirmó el Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio (CREA, por sus siglas en inglés), con sede en Helsinki, tras evaluar los datos sobre emisiones y encuestar a 26 expertos chinos en energía.
Si bien China ha conseguido "logros notables" en ámbitos como la energía limpia y los vehículos eléctricos, el informe señala que sigue "fuera de juego" en la energía de carbón, el hierro y el acero. El consumo de energía, impulsado por el fuerte crecimiento económico industrial, seguía aumentando demasiado rápido para alcanzar los objetivos climáticos.
Las conversaciones mundiales sobre el clima concluyeron el domingo con el compromiso de crear un fondo para ayudar a los países más vulnerables, pero no se obtuvo un consenso para que las emisiones mundiales alcancen su punto máximo en 2025.
Se espera que China cumpla su propio objetivo de pico de emisiones para 2030 con relativa facilidad, pero a los expertos les preocupa que el volumen global pueda seguir aumentando de forma significativa a lo largo de la década, mientras Pekín construye nuevas plantas de carbón y otras infraestructuras de alto consumo de carbono para hacer frente a las preocupaciones sobre la seguridad energética y la estabilidad económica.
Cuanto más alto sea el pico, más difícil será para Pekín cumplir su objetivo de 2060 de ser neutral en cuanto a las emisiones de carbono, dijo el CREA, que añadió que era "crucialmente importante" para China no solo cumplir sino superar significativamente los objetivos.
Este mes, un informe anual del Proyecto Global del Carbono (GCP, por sus siglas en inglés) estimó que las emisiones de China caerían un 0,9% en 2022, lo que hace esperar que ya hayan tocado techo
Sin embargo, el descenso se atribuyó a las draconianas políticas de cero emisiones del país, que perturbaron gravemente la economía y dejaron confinado el centro financiero de Shanghái durante más de dos meses.
"Subirán", dijo Pep Canadell, director general de GCP y uno de los autores del informe. "En los próximos años veremos un crecimiento (de las emisiones) procedente de China, antes de ver una estabilización y, finalmente, un descenso".
(Reporte de David Stanway; editado en español por Flora Gómez)