Viena, 19 oct (.).- La economía de Europa central y del este, pese a su cercanía a la zona de guerra entre Rusia y Ucrania, no se ha resentido por el conflicto tanto como se esperaba, aunque se arriesga a una recesión en 2023 debido a una inflación de más de dos dígitos en toda la región.
Ese es el panorama que ha presentado este miércoles el Instituto de Viena para Estudios Económicos Internacionales (Wiiw) en su informe titulado "Pronósticos de otoño".
La recuperación tras la pandemia de la covid ha deparado a la región un "crecimiento superior al esperado" inicialmente, razón por la que el Wiiw ha revisado al alza sus pronósticos para este año.
Ahora prevé que el crecimiento medio de los países de la zona que son miembros de la Unión Europea (UE) será del 3,9 %, mientras que en los Balcanes occidentales se situará en el 3,1 % y en Turquía crecerá un 5,1 %.
Aunque estos porcentajes son significativamente menores que los registrados en 2021, para los economistas del Wiiw la evolución de la economía de la zona "sigue siendo sorprendentemente buena" teniendo en cuenta su exposición a la guerra en Ucrania.
Eso sí, advierten de que "lo peor está aún por llegar": prevén un impacto negativo el próximo año, causado sobre todo por la crisis energética, que podrá sentirse previsiblemente ya este invierno.
Con una inflación de dos dígitos, "las subidas de los tipos de interés" y "la caída de la confianza de los consumidores" en medio de la crisis energética las perspectivas a corto plazo son sombrías, advierte el Wiiw en un comunicado.
La subida de los precios de los alimentos y la energía reducen el poder adquisitivo de los consumidores, que ha sido "hasta ahora el pilar más importante del crecimiento económico" de la región, señala en la nota Branimir Jovanovic, economista del instituto vienés y autor principal del informe.
Con respecto a la situación de Ucrania tras ocho meses de invasión rusa, el instituto la califica de "lamentable", con un desplome de su economía del 33 % este año con respecto a 2021.
El producto interior bruto (PIB) ucraniano podría crecer un 5,5 % en 2023, si bien este pronóstico está sujeto a grandes incertidumbres sobre la evolución de la invasión rusa del país.
En cuanto a Rusia, el Wiiw estima que su economía se ha contraído menos de lo esperado (un 1,5 % en los ochos primeros meses de este año, que llegaría al 3,5 % en todo 2022) gracias en gran parte a la considerable subida de los precios del gas, petróleo y carbón que exporta.