Buenos Aires, 24 feb (EFE).- La Asamblea Ambiental de la ciudad
argentina de Gualeguaychú aseguró hoy a Efe que en ningún momento
tuvo intención de manifestarse en la toma de posesión de José Mujica
como presidente de Uruguay, como sugirieron algunos medios de
prensa, pero confirmó que le ha pedido una audiencia.
"Nunca lo tuvimos pensado. Es lo que surgió allá (en Uruguay),
fruto de la especulación. Nosotros nos callamos la boca, nunca
concretamos nada. En realidad nunca lo pensamos. Lo que sí tenemos
es una audiencia pedida cuando Mujica considere que nos pueda
recibir. Estamos a la espera de que nos confirmen", explicó el
asambleísta Gustavo Rivollier.
Lo único que se habían planteado es la posibilidad de hacerle
llegar un presente, como algo significativo, "pero nada más que
eso", porque la asunción "es un acto democrático, un cambio de
Gobierno es una fiesta que hay que respetar y es bienvenida, por
supuesto", añadió.
La Asamblea mantiene desde 2006 el bloqueo del puente General San
Martín, que une a Argentina y Uruguay, en protesta por la
instalación de una planta de la papelera finlandesa Botnia, que
desató hace más de seis años el peor conflicto en décadas entre los
Gobiernos de ambos países.
Argentina considera que la papelera contamina el río Uruguay, y
que el Gobierno uruguayo autorizó su instalación de forma
unilateral, sin hacer caso a un tratado bilateral de 1975 sobre la
administración compartida del recurso fluvial.
El conflicto ha llegado incluso a la Corte Internacional de
Justicia de La Haya, que en el primer semestre de este año debe
emitir un veredicto al respecto.
Mujica, que el primero de marzo asumirá como presidente de
Uruguay, aseguró recientemente que el conflicto entre ambos países
por la papelera "ya se va a arreglar".
Rivollier reconoció que no creen que sea fácil la solución al
problema, pero que aunque saben que Mujica llega "muy condicionado",
han estado atentos a todas las declaraciones que ha hecho al
respecto y "hay cosas que están muy bien".
"En determinado momento ha dicho que Botnia es el problema, no el
corte, lo ha aceptado como una consecuencia, no como una causa.
Vemos buenos gestos de su parte, pero obviamente sabemos que el
panorama no es fácil ", indicó el ambientalista.
No obstante, en su opinión "tener voluntad es bastante, es tener
alguna expectativa de, al menos, poder sentarnos a conversar. No es
poco, no tener voluntad significaría que estamos en cero", concluyó.
EFE