Atenas, 26 ago (EFE).- Más de 8.500 jubilados de muy avanzada
edad, entre ellos 500 que han superado los 110 años de edad, siguen
cobrando su pensión en Grecia, un hecho que ha provocado que el
Gobierno investigue si esos pensionistas siguen efectivamente vivos
o si el dinero va a parar a sus familiares.
El ministro de Trabajo, Andreas Loverdos, ha anunciado que la
Fiscalía ha ordenado una investigación y que ya están en curso
controles para averiguar si esos longevos pensionistas siguen vivos.
El crónico caos que padece la burocracia en Grecia permite que se
hayan detectado casos de personas que llevan cobrando la pensión
desde 1954.
Por su parte, el viceministro de Trabajo, Yorgos Kutrumanis, ha
explicado que esos controles ya han permitido detectar 321 casos de
jubilados "fantasmas", en los que la pensión seguía siendo abonada
pese a la muerte y, en muchas ocasiones, cobrada por los familiares.
Kutrumanis reconoció la lentitud y la falta de exactitud de los
sistemas para evitar esas situaciones y aseguró que en ocasiones se
tarda hasta siete años en cancelar los pagos de la pensión de un
jubilado fallecido.
En cualquier caso, el viceministro explicó que no siempre se
trata de una estafa, ya que se han dado casos en los que el dinero
era transferido a una cuenta corriente de donde no era retirado por
nadie.
"Esta situación no se puede producir más", aseguró Kutrumanis, al
considerarlo un fenómeno ajenos "a un país que quiere ser llamado
europeo". EFE