Quito, 14 ene (EFE).- Roque Sevilla, ex miembro del Comité
gubernamental ecuatoriano encargado de una iniciativa para no
explotar el petróleo del campo Yasuní a cambio de una compensación
internacional, manifestó hoy su esperanza de que el proyecto siga
adelante, pues tuvo un respaldo "gigantesco".
Sevilla renunció esta semana al Comité luego de que el jefe de
Estado de Ecuador, Rafael Correa, criticase unas supuestas
condiciones de contribuyentes para conformar el fideicomiso que
administraría el dinero recaudado para el proyecto Yasuní ITT, cuyo
fin es contribuir a preservar el medio ambiente.
Esas críticas también desembocaron en la renuncia de otros
miembros del Comité, así como del canciller Fánder Falconí, uno de
los mayores impulsores del proyecto.
Sevilla expresó hoy su esperanza de que el proyecto siga adelante
pues ha tenido, según dijo, un respaldo internacional "enorme,
gigantesco" y aseguró que le sorprendieron las declaraciones de
Correa pues las encuentra injustificadas.
Añadió que entre "posibles y probables" donaciones habían
conseguido entre 1.500 y de 1.700 millones de dólares, que se
concretarían cuando se constituyese el fideicomiso.
En declaraciones a la televisión local Telamazonas, señaló que
esa cifra, conseguida en seis meses, "es un récord mundial" y aún
quedaba un año de gestión para conseguir más dinero.
"Recién habíamos cubierto cinco países de veintiséis, o sea la
lista era larga", añadió al citar, por ejemplo que no se había
completado la gestión con Estados Unidos, Japón y China.
Sevilla prefirió ser "optimista" y considerar que la iniciativa
puede continuar, y agregó que el jefe de Estado debe dar una
explicación sobre sus declaraciones.
Falconí renunció el martes debido a las afirmaciones de Correa
sobre el fideicomiso. El presidente dijo el pasado sábado que
donantes que no identificó pretendían imponer condiciones, a su
criterio, "vergonzosas" como el tener la mayor parte en el
fideicomiso y calificar los proyectos.
"Si es así, quédense con su plata (dinero) y en junio empezamos a
explotar el ITT. Aquí no vamos a claudicar en nuestra soberanía.
Entiendan que los que más sacrificio estamos haciendo somos los
ciudadanos de Ecuador, en cualquier parte del mundo hubieran
explotado el petróleo", recalcó Correa.
En una rueda de prensa, el ex canciller aseguró ayer que "los
aportantes, los gobiernos, no han intervenido en la negociación.
Ecuador ha hecho la revisión de los términos de referencia
directamente con Naciones Unidas, por lo tanto, no es que ningún
Gobierno exige que la fiducia sea de tal manera", subrayó.
Falconí reveló que explicó el pasado lunes a Correa ese
particular y éste le indicó telefónicamente que "al parecer le
habían dado mala información por parte de alguien en la
Presidencia".
Añadió que el martes Correa le indicó que quería cambiar la
gestión de la iniciativa ITT al Ministerio del Ambiente o de
Patrimonio Natural y que se reafirmaba en el plazo de seis meses.
"A mí esto me resultó inaceptable", apuntó al señalar que, a su
criterio, "la fiducia del ITT está a punto de cerrarse. Se la podría
cerrar en dos semanas".
La Iniciativa Yasuní-ITT (Ishpingo-Tambococha-Tiputini) es un
ambicioso proyecto ambiental que supone dejar de explotar un gran
yacimiento petrolífero ubicado en una zona de alta concentración de
biodiversidad en la Amazonía, a cambio de una compensación de la
comunidad internacional.
El proyecto ITT prevé evitar la producción de 410 millones de
toneladas de dióxido de carbono (CO2) por la no explotación del
petróleo, por lo cual Ecuador pide a la comunidad internacional una
compensación económica. EFE