MADRID (Reuters) - El operador de telecomunicaciones Yoigo, filial de TeliaSonera, puso en marcha el jueves una ofensiva comercial y rebajó los precios de muchos de sus servicios para captar nuevos abonados tras cerrarse sin éxito el proceso de la matriz sueca de buscar un comprador para su negocio en España.
"Yoigo no está en venta, nuestros dueños han dicho que se ha cerrado el proceso de venta por falta de ofertas atractivas", dijo Eduardo Taulet, el consejero delegado de Yoigo, en la presentación de las nuevas tarifas del cuarto operador móvil en España.
Taulet señaló que con más de cuatro millones de clientes Yoigo se ha convertido en una empresa rentable, que genera un Ebitda de entre 9 y 12 millones de euros y no necesita el apoyo de sus accionistas para acometer nuevas inversiones.
No obstante, Taulet no descartó que algún día Yoigo cambie de dueño.
"Lo normal sería que este mercado converja hacia un modelo con tres operadores", dijo Taulet.
El proceso de consolidación se ha acelerado en los últimos meses al comprar Vodafone al operador de cable Ono en primavera y lanzar Orange una oferta por Jazztel.
Estas operaciones habían alentado las especulaciones de que Yoigo podría convertirse tarde o temprano en el siguiente objetivo, sobre todo después de que TeliaSonera anunciara en septiembre que estaba en conversaciones con varios operadores para estudiar la posible venta de Yoigo.
TeliaSonera ostenta el 76,6 por ciento de Yoigo. Los demás accionistas son los grupos españoles de construcción ACS, con un 17 por ciento y FCC con un 3,4 por ciento. El tres por ciento restante está en manos de Schneider Electric a través de su participación en Telvent.
Tras suspenderse el proceso de venta, Yoigo redoblará sus esfuerzos de ganar clientes y ampliar su red de telefonía móvil para poder ofrecer a finales de año una cobertura del 76 por ciento en España, explicó Taulet.
Preguntado de si la entrada de Carlos Slim, el magnate de telecomunicaciones mexicano, en FCC podría tener consecuencias para Yoigo, Taulet se limitó a decir que le encantaría contar con Slim como accionista, aunque añadió que veía poco probable que la llegada del inversor mexicano tuviera que ver algo con el negocio de las telecomunicaciones en España.
(Información de Robert Hetz; Editado por Emma Pinedo)