Por Christoph Steitz y Susanna Twidale
FRÁNCFORT/LONDRES (Reuters) - SSE quiere aumentar la presión sobre el líder del mercado British Gas fusionando sus actividades de electricidad y gas en Reino Unido con las de npower, división británica de la alemana Innogy (DE:IGY). El acuerdo apuntalará el segundo puesto de SSE en el sector de suministro con ventas proforma de 11.000 millones de libras (14.500 millones de dólares) y podría ser el pistoletazo del salida para la consolidación del mercado británico, en el que firmas establecidas están luchando contra rivales más pequeñas y ágiles.
Los cerca de 11,5 millones de clientes de la nueva firma acercarían a SSE a los más de 14 millones que tiene la filial de Centrica. La compañía ampliada, en la que SSE tendría una participación de alrededor de dos tercios, y British Gas controlarían entre las dos más del 50 por ciento del mercado, aunque el consejero delegado de Innogy, Peter Terium, dijo que confiaba en que los reguladores británicos aprobarían el acuerdo. "Cuando observamos el panorama competitivo y el entorno político incierto para los minoristas de energía en Reino Unido, está claro que npower estaría en mejor posición para ofrecer valor a nuestros clientes y accionistas dentro de una nueva compañía", dijo Terium.
La operación, que necesita el visto bueno de los accionistas de SSE y del consejo de supervisión de Innogy, reduciría de seis a cinco el número de grandes comercializadoras de energía británicas. El cierre de la misma se espera para finales de 2018 o principios de 2019.
Con la fusión de sus divisiones minoristas. Innogy y SSE crearían un grupo con unas ventas proforma de 10.900 millones de libras y un beneficio operativo de 123 millones de libras en 2017. Previsiblemente se convertiría en una empresa de pequeña o mediana capitalización en la Bolsa de Londres.
Innogy y SSE están asesoradas respectivamente por Goldman Sachs (NYSE:GS) y Credit Suisse (SIX:CSGN), dijo Terium.
Los rivales más pequeños, a menudo capaces de ofrecer ofertas más baratas por sus menores gastos generales, controlan ahora aproximadamente el 20 por ciento del mercado británico, frente al 1 por ciento que tenían hace una década. Los analistas esperan más consolidación en el futuro.
La alemana E.ON (DE:EONGn), integrante del grupo de las denominadas "Big Six" del sector de suministro eléctrico británico dijo el miércoles que en lo que va de año ha perdido 200.000 clientes en Reino Unido.
Actualmente, hay cerca de 60 suministradoras.
"Teniendo en cuenta la interferencia que hay en el mercado con el techo para los precios (que quiere introducir el Gobierno) y la presión sobre los márgenes, la reacción natural es que las empresas traten de ganar escala", dijo Peter Atherton, socio de la consultora Cornwall Insight.
La autoridad de competencia y mercados británica (CMA) dijo que estaba al tanto del acuerdo pero no quiso hacer comentarios sobre si bendeciría la fusión.
Los analistas se mostraron preocupados por los potenciales problemas de combinar las plataformas informáticas de Innogy y SSE, que según Bernstein se ejecutan en dos sistemas diferentes.
SSE tendrá un 65,6 por ciento de la nueva entidad, que no incluirá el negocio minorista para empresas ni las operaciones en Irlanda. Innogy, que recibiría un pago de 60 millones de libras si SSE no consigue su aprobación antes del 31 de julio de 2018, tendrá la participación restante.