Eran las 10 de la noche del 15 de julio de 2016 cuando en Estambul y Ankara hicieron irrupción vehículos militares y soldados, ante una población desconcertada. Tanques y blindados bloquearon el Puente del Bosforo y el aeropuerto Atatürk. El espacio aéreo fue cerrado. El rumor de que se trataba de un golpe militar corrió como la pólvora. Los más osados, empezaron a salir a la calle a plantar cara a los sublevados.