Bruselas, 25 feb (EFE).- La Comisión Europea (CE) mostró hoy su
"optimismo" ante la posibilidad de cerrar un acuerdo comercial con
Colombia y Perú durante la presente ronda de negociaciones que
celebran esta semana en Bruselas, aunque los asuntos que quedan por
concluir son "los más difíciles".
Fuentes comunitarias aseguraron hoy que las negociaciones de la
IX ronda, que está previsto que concluya mañana, viernes, podrían
prolongarse durante el fin de semana si de esa manera se logra
cerrar un buen acuerdo para todas las partes, que ya sólo deben
trabajar en el "3 ó 5 por ciento" del tratado que queda por
resolver.
Señalaron que las trece mesas de trabajo ya están cerradas y que
ahora se debate a nivel de jefes negociadores.
Desde hoy participan también en las reuniones los ministros de
Comercio de Colombia, Luis Guillermo Plata, y de Perú, Martín Pérez,
para dar un último impulso político al proceso.
Según las fuentes, los andinos siguen pidiendo mejoras para el
acceso de importantes productos agrícolas al mercado europeo, como
puede ser bananas, azúcar, ron, arroz, y carne de ave y de vacuno.
Colombia intenta conseguir una oferta más interesante para sus
exportaciones de banano que el acuerdo cerrado el pasado diciembre
en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC), según el
cual el arancel se rebajará de los 176 euros por tonelada actuales a
los 114 euros en unos ocho años.
La UE aceptará la "influencia" de ese acuerdo en las
negociaciones con los andinos, admitieron fuentes europeas.
Colombia también confía en mejorar el cupo de exportación de
62.000 toneladas de azúcar sin gravámenes ofrecido por la UE.
Perú espera en concreto que el acuerdo tenga en cuenta para
establecer las reglas de origen de los productos pesqueros 200
millas de mar peruano.
Mientras, Europa aspira a una mayor apertura de Bogotá a sus
productos lácteos (leche en polvo, mantequilla) y que su whisky y
vodka lleguen sin restricciones al consumidor colombiano, al igual
que sus productos derivados del cerdo.
Respecto a la importación de vehículos, la UE confía en que
Colombia reduzca sus aranceles, actualmente del 35 por ciento (los
de Perú se sitúan en un 9 por ciento).
La propuesta colombiana consiste en una reducción en un plazo de
diez años, pero la UE pide que se haga en cinco, en especial en los
automóviles de "alta gama".
Las fuentes comunitarias afirmaron que la cuota de exportaciones
europeas de vehículos es de entre un 3 y 5 por ciento tanto en
Colombia como en Perú, dos mercados "diferentes" entre sí, no
obstante.
Por lo que respecta a la protección de los derechos humanos, la
UE pretende incluir una cláusula mediante la cual el tratado se
podrá suspender de manera unilateral (con la aprobación unánime de
los países europeos), si se registran violaciones en este ámbito.
"Lo que hemos visto es que Colombia se ha comprometido con
instituciones internacionales (...) y que la situación está
mejorando" en el ámbito de los derechos humanos, indicaron las
fuentes, que recordaron que el comisario europeo de Comercio, Karel
De Gucht, ha prometido un debate sobre este asunto antes del inicio
del acuerdo.
Además, si no se cumplen las convenciones medioambientales y
laborales, el acuerdo no quedará suspendido automáticamente pero un
"panel de expertos" emitirá recomendaciones que serán publicadas y
estarán abiertas a la sociedad civil, para "provocar lo más posible
el diálogo entre países", precisaron. EFE