Bruselas, 11 feb (EFE).- Los líderes de los dieciséis países de
la zona euro han expresado hoy su apoyo público al Gobierno griego
en el colosal desafío de sanear sus finanzas públicas con la promesa
de que acudirán en su ayuda si fuera necesario.
Las especulaciones en torno a un supuesto plan europeo de rescate
para Grecia, un socio del euro con dificultades crecientes de
financiación, se han traducido finalmente en una simple declaración
política de apoyo.
Antes de la reunión informal de los gobernantes de la Unión
Europea (UE), los principales protagonistas llegaron a un acuerdo
sobre el mensaje que iban a dirigir a los mercados para bajar la
presión sobre los bonos griegos y hacer frente a las turbulencias de
los últimos días.
El encargado de leer la "declaración" ante las cámaras fue el
presidente de la UE, el belga Herman Van Rompuy, después de una
serie de encuentros mantenidos esta mañana con la canciller alemana,
Angela Merkel; el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer
ministro griego, George Papandreu, así como con los dirigentes de
los principales órganos rectores de la unión monetaria.
El texto supone una amonestación en toda regla a Grecia, aunque
sin citarla, pero también la primera declaración pública en la que
Alemania y Francia, especialmente, asumen tácitamente la
responsabilidad última de la estabilidad financiera en la Eurozona.
"Los miembros de la zona euro tomarán medidas decididas y
coordinadas, si fuera necesario, para salvaguardar la estabilidad
financiera en la zona en su conjunto", afirma la declaración leída
por Van Rompuy.
Qué tipo de medidas pueden ser ésas no queda dicho, pero sobre la
cuestión continuarán trabajando los ministros de Finanzas del
Eurogrupo.
El Tratado prohíbe expresamente a las instituciones europeas
financiar directamente el endeudamiento de un miembro de la zona
euro, por lo que habrían de buscarse otras maneras bilaterales e
indirectas de hacerle llegar el dinero al Estado griego, en caso de
que viera cortado el suministro normal en los mercados.
El texto deja claro que "el Gobierno griego no ha solicitado
ningún apoyo financiero" a sus socios.
Los líderes de la zona -dieciséis de los veintisiete estados de
la UE- recuerdan a Atenas que todos "comparten la responsabilidad de
la estabilidad económica y financiera" en el área de la moneda única
europea.
Los estratosféricos déficit y deuda públicos helenos (12,7% y más
del 120% del PIB en 2009, respectivamente) no son el resultado sólo
de la crisis económica, sino de años de mala gestión de los recursos
públicos y políticas insanas.
"Apoyamos plenamente los esfuerzos del Gobierno griego y su
compromiso de hacer todo lo que sea preciso, incluida la adopción de
medidas adicionales, para asegurar que se alcanzan los ambiciosos
objetivos establecidos en su programa de estabilidad para 2010 y los
años sucesivos", afirman los europeos.
Los socios esperan que Papandreu lleve a la práctica el drástico
plan de ajuste negociado con Bruselas y confirman de hecho que las
cuentas públicas griegas van a quedar de ahora en adelante bajo
tutela de las instituciones comunitarias.
"Hacemos un llamamiento al Gobierno griego para que aplique todas
esas medidas de manera rigurosa y determinada, a fin de reducir de
forma efectiva el déficit público en cuatro puntos porcentuales en
2010", indica la declaración.
Los ministros de Economía y Finanzas de la UE -los únicos
capacitados para tomar estas decisiones de vigilancia multilateral-
adoptarán en su próxima reunión, prevista para el próximo martes en
Bruselas, recomendaciones precisas para Grecia, basadas en la
propuesta que ya ha elaborado la Comisión Europea (CE), y en las
medidas adicionales que el propio Gobierno griego ha anunciado.
La CE, según el documento, "vigilará estrechamente el
cumplimiento de las recomendaciones", en estrecho contacto con el
Banco Central Europeo (BCE).
Los socios de la moneda única están de acuerdo asimismo en que la
Comisión de la UE propondrá "medidas adicionales" de ajuste, si las
cuentas lo requieren, "basándose en la pericia del Fondo Monetario
Internacional" (FMI).
Queda descartado, por lo tanto, un acceso a los recursos del FMI,
aunque no a su experiencia técnica.
La primera evaluación de esta vigilancia estrecha será realizada
en marzo. EFE