Bruselas, 23 sep (EFE).- Los ministros de Agricultura de la Unión
Europea (UE) discutirán el próximo lunes sobre la subida de los
precios de los cereales y su impacto en los costes de producción
ganadera.
El Consejo agrícola comunitario analizará la situación de ese
mercado a petición de Polonia, que ha alertado sobre el
encarecimiento del cereal este verano, como consecuencia de
reducciones de cosechas en países como Rusia o Canadá y ha pedido
medidas para que bajen los precios.
En concreto, Polonia reclama sacar cereales de los almacenes
públicos -sometidos a la llamada intervención-.
La discusión es de interés para España, por ser un país que
tradicionalmente importa cereales.
Precisamente desde el sector ganadero español o de los
fabricantes de piensos ha habido peticiones en las últimas semanas
para que la Comisión Europea (CE) decida comercializar cereal que
ahora está guardado en los almacenes públicos; España solicitó esa
medida en algún comité técnico.
Polonia ha defendido, en un documento presentado al Consejo de la
UE, actuaciones a escala europea para estabilizar el mercado y
garantizar el funcionamiento "correcto de la cadena de producción
alimentaria".
Según los cálculos polacos, los precios subieron entre el 33% y
el 59% entre julio y septiembre.
El Gobierno polaco ha recordado que en 2007 y en 2008 hubo un
fuerte incremento en el precio de los cereales que causó una crisis
alimentaria mundial por la escasez de materias primas y perjudicó a
la ganadería, especialmente a los sectores porcino y avícola, a
causa del encarecimiento de los piensos.
Por este motivo, Polonia cree que, de los 5,8 millones de
toneladas de cereales guardados por la intervención de la UE,
deberían ponerse a la venta 2,9 millones, pues el resto va a usarse
para los planes europeos de ayuda alimentaria a las clases más
desfavorecidas, según el documento enviado al Consejo.
El comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, declaró a
principios de esta semana que aún es pronto para recurrir a la
salida de cereales de la intervención, pues estima que habrá que
esperar datos más claros sobre la cosecha. EFE