París, 22 sep (EFE).- La agencia de evaluación de riesgos Moody's
elevó hoy su perspectiva de crédito sobre el sistema bancario
francés de "negativa" a "estable", lo que expresa las expectativas
de esa agencia sobre las condiciones fundamentales de crédito de las
entidades galas en los próximos 12 a 18 meses.
"A pesar de la crisis financiera y de las pérdidas asociadas a
ésta, algunas características estructurales han ayudado a proteger
al sistema de bancos de Francia de impactos significativos" y han
sentado las bases para una actuación más estable en el futuro,
señala Moody's.
No obstante, la agencia subraya en su informe -que analiza los
cinco bancos más importantes de Francia- que el sistema galo no es
"inmune" a un segundo bache recesivo o a una crisis sistémica.
Las exposiciones a las deudas soberanas de algunos Estados
europeos como Grecia, Portugal, España e Irlanda son "sustanciales"
aunque parecen "gestionables", dice Moody's, que recuerda que las
pruebas de solvencia llevadas a cabo por las autoridades de la Unión
Europea (UE) y publicadas el pasado julio corroboran las
conclusiones de la agencia de evaluación.
Además, las recientes ampliaciones de capital de algunas
entidades, entre otros elementos, ofrecen solidez adicional al
reducir los activos de riesgo y estabilizar el nivel de sus
ingresos, agrega.
Moody's celebra también las decisiones del Gobierno "proactivo"
de un país que ha probado un "alto apoyo" cuando se trata de
"proveer asistencia a los bancos en dificultades en momentos de
tensión".
"Mientras que el Estado sin duda ha desempeñado un papel
importante en la reorganización del paisaje bancario (especialmente
con la creación del BPCE, fusión de Caisse d'Epargne y Banque
Populaire), los bancos franceses generalmente han evitado las
imposiciones de reestructuración de la UE", añade.
Las inyecciones de capital aportadas por el Gobierno de Francia
tras las secuelas de la insolvencia de Lehman Brothers' han sido
ampliamente restituidas, prosigue la agencia de evaluación.
Todos esos factores hacen que Moody's estime que los bancos
franceses "puedan soportar futuros desafíos o incertidumbres".
Del análisis de los cinco mayores bancos de Francia -Crédit
Agricole, Banque Dédérative du Crédit Mutuel, BNP Paribas, Société
Générale y BPCE, del que se excluye el público La Banque Postale) la
agencia deduce que el sistema diversifica las actividades y riesgos,
posee una gran capacidad interna para generar capital y para
responder adecuadamente ante hipotéticos escenarios de tensión.
También en positivo, Moody's resalta el "relativamente pequeño"
nivel de endeudamiento de los hogares franceses, que supone una
"protección natural" frente a las hipotecas, que en Francia no
pueden superar el 33 por ciento del nivel de ingresos del deudor.
Entre las debilidades del sistema, la agencia señala que el
ambiente macroeconómico sigue siendo débil, con un creciente nivel
de desempleo, lo que puede tener efectos sobre el crédito.
La elevada internacionalización de algunos bancos galos suponen
diversificación, pero también "exposiciones a economías que viven
situaciones de tensión, como la griega, la española, la irlandesa o
la portuguesa, aunque la agencia no lo considera una "amenaza
sustancial".
Entre los desafíos a los que tendrán que hacer frente las
instituciones de crédito en los próximos meses, Moody's destaca las
eventuales necesidades de refinanciación, las exposiciones a
ambientes volátiles como Rusia o Grecia, un eventual deterioro del
crédito al consumo o la tendencia indeterminada del mercado
inmobiliario. EFE