Londres, 14 ene (EFE).- El ministro británico para la Empresa,
Peter Mandelson, ha pedido a los inversores de este país que piensen
siempre en los intereses a largo plazo de las empresas en lugar de
dejarse obnubilar por las ganancias inmediatas a la hora de aceptar
determinadas opas.
En un artículo publicado en la edición en línea del Financial
Times, el político laborista reconoce los beneficios que suponen los
fondos de inversiones bien gestionados, pero advierte al mismo
tiempo de sus peligros.
Así, puede sucumbirse fácilmente a la tentación de dejarse guiar
por los resultados trimestrales y los precios a corto plazo de las
acciones sin tener en cuenta los intereses a largo plazo de las
empresas en las que tienen depositado su dinero, señala Mandelson.
Casi todo el mundo que tiene un fondo de pensiones está en esa
posición, señala el ministro de Gordon Brown.
La advertencia de Mandelson parece tener que ver con la opa
hostil lanzada por el gigante norteamericano Kraft sobre la empresa
chocolatera británica Cadbury y será con seguridad uno de los temas
que trate el ministro con un grupo de inversores constitucionales a
los que ha convocado hoy a una reunión en Londres.
Entre los convocados figuran Keith Skeoch, de Standard Life
Investments, Peter Chambers, de Legal & General Investment
Management, y Lindsay Tomlinson, de Barclays Global Investors, que
es presidente de la Asociación Nacional de Fondos de Pensiones.
Según Mandelson, "es un secreto a voces que muchas fusiones no
crean valor adicional a largo plazo para la compañía objeto de la
fusión".
Es pues necesario exigir a quien lanza una opa que exponga
abiertamente sus planes para con la plantilla de la empresa
afectada, afirma el ministro, según el cual "los accionistas de
ambas partes deben ser muy críticos".
Los sindicatos se muestran, sin embargo, escépticos sobre los
resultados que puede tener la reunión de hoy del ministro con los
ejecutivos de fondos de inversión.
"Está bien que se celebre la reunión, pero no basta con pedir a
los accionistas que piensen a largo plazo", afirmó anoche Jack
Dromey, secretario general adjunto de Unite, el mayor sindicato
británico.
"Es preciso modificar el régimen que gobierna las opas de forma
que, al igual que ocurre en Alemania", el Gobierno pueda intervenir
para impedir que activos industriales de importancia estratégica
nacional caigan en manos de predadores", dijo Dromey.
"¿Por qué no hacer como en Francia y dar votos ponderados a los
accionistas que están en una empresa por consideraciones de largo
plazo?", se preguntó a continuación.
Fuentes del Gobierno insisten en que Mandelson no proyecta
introducir, sin embargo, tales controles ya que ha criticado siempre
el proteccionismo y ha defendido en cambio el sistema británico de
economía abierta.
Algunos inversores se muestran, no obstante, críticos con lo que
perciben como un intento intervencionista del Gobierno.
"No vamos a hacer que Cadbury siga siendo una empresa británica
sólo para complacer al Gobierno y a los sindicatos. Tenemos que
actuar en interés de nuestros clientes", dijo al periódico un
inversor. EFE