Atenas, 24 feb (EFE).- La huelga general convocada hoy en Grecia
en protesta del plan anticrisis del gobierno socialista cuenta con
una muy alta participación en el sector público y privado, aseguran
los dos principales sindicatos del país.
El portavoz de la Unión de Empleados Civiles (ADEDY), Spiros
Papaspiros, señaló a Efe en Atenas un 80 por ciento de los empleados
convocados al paro laboral no han acudido a sus puestos de trabajo.
Una participación similar se produjo en la huelga del sector
privado, aseguraron fuentes del sindicato GSEE.
Dos grandes manifestaciones de esos sindicatos llenaron hoy el
centro de Atenas, con especial fuerza de los trabajadores
comunistas, aunque por ahora sin serios incidentes.
Las oficinas públicas, hospitales, universidades y gran parte del
transporte público urbano no funcionan hoy, mientras que todos los
servicios de trenes y aviones han sido cancelados hasta las 06.00
(04.00 GMT) de la mañana de mañana, jueves.
En los hospitales públicos los médicos sólo atienden los casos de
máxima emergencia, mientras que las cadenas de televisión y las
radios no emiten noticieros.
Eso sí, en el sector turístico no hay huelga mientras que algunos
supermercados y otras tiendas sí han abierto hoy.
Los sindicatos prometieron en las principales manifestaciones
"más huelgas hasta que el gobierno nos escuche" y en muchas
pancartas se pueden leer lemas como "no seremos nosotros quienes
paguemos por la crisis de los ricos" o "El pueblo y sus necesidades
son más importantes que los mercados".
La policía griega calcula que la participación en las
manifestaciones de Atenas es de en torno a unas 20.000 personas,
cuando los sindicatos lo elevaban hasta al menos el doble.
La huelga, convocada por ADEDY y GSEE, se dirige contra las
estrictas medidas de austeridad, impuestas a Grecia por la Unión
Europea (UE) por su desbordante endeudamiento.
El primer ministro griego, Giorgios Papandreu, quiere recortar
los sueldos de los funcionarios públicos, reducir el gasto social en
un 10 por ciento y aumentar algunos impuestos para reducir el
déficit público en 4 puntos porcentuales este año.
Ante la huelga de hoy, Papandreu había expresado su comprensión
por el malestar popular aunque recordó al mismo tiempo que el Estado
griego simplemente "no tiene más dinero".
Los sindicatos aseguran que el Gobierno ahorra en los lugares
equivocados y exige que el ahorro se reparta de forma más justa para
que empleados y jubilados no sean lo que pagan para los efectos de
la crisis. EFE