MADRID (Reuters) - Tras ocho años de fuerte crecimiento, el gobierno español espera para 2018 un leve descenso de la llegada de turistas por la inestabilidad política en Cataluña y la saturación que se registró el año pasado en algunas zonas.
Según datos presentados el martes por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, España cerrará 2018 con un total de 81,2 millones de turistas, un descenso del 0,8 por ciento frente al récord histórico de 81,9 millones registrado el año anterior.
"La inestabilidad política en Cataluña es uno de los motivos asociados al descenso del turismo en esta región", dijo Maroto.
Cataluña es el principal destino para el turismo internacional en España, pero entre enero y agosto el número de turistas en esta región bajó un 2,7 por ciento.
No obstante, Maroto dijo que parte de este retroceso se debe también a un "proceso de normalización y estabilización de los flujos turísticos" tras su reciente repunte.
Entre 2009 y 2017, el número de turistas en España subió desde 52,2 millones a casi 82 millones, aprovechando en parte de la inestabilidad en otros destinos tradicionales en el Mediterráneo y Oriente Próximo.
En algunas zonas de España, la masificación y la saturación de las instalaciones causó problemas no solo para los turistas, sino también para los residentes.
Así, en las Baleares, donde se registró en 2017 una fuerte contestación social contra la congestión de los sitios turísticos, la llegada de turistas bajó un 0,8 por ciento en los primero 8 meses de este año.
En el conjunto de España el número de turistas bajó entre enero y agosto un 0,1 por ciento a 57,3 millones, debido a los retrocesos sufridos en la temporada alta (-4,9 por ciento en julio y -1,9 por ciento en agosto).
Pero pese al descenso del número de turistas, el gobierno espera para 2018 un incremento del gasto turístico del 2,8 por ciento hasta un nuevo récord de 89.440 millones de euros, debido a un aumento del gasto medio por turista.
(Información de Robert Hetz, editado por Rodrigo de Miguel)