Madrid, 20 abr (.).- La patronal de la industrial digital Ametic ha planteado al Gobierno una hoja de ruta para la formación de habilidades digitales que afecta a más de 6,5 millones de personas y que contiene medidas que se pueden desarrollar en 18 meses con una inversión de 900 millones de euros.
Esta hoja de ruta se incluye en un Libro Blanco impulsado por Ametic, que ya ha sido trasladado a los ministerios de Asuntos Económicos y Transformación Digital y al de Educación y FP y que quiere servir de complemento al Plan Nacional de Competencias Digitales lanzado por el Ejecutivo, ha informado este martes en rueda de prensa el presidente de Ametic, Pedro Mier.
Este Libro Blanco, que ha sido elaborado con la participación de representantes de más de un centenar de empresas, entre otros, pretende ser una herramienta con la que ayudar al Gobierno al reparto de los fondos que se incluyen en el Plan Nacional de Competencias Digitales, con un presupuesto de 3.700 millones de euros.
El coordinador del Libro, Javier Rodríguez Zapatero, ha desgranado las diez líneas de trabajo de este Libro Blanco, una de las cuales, la dedicada a las pymes, especialmente las más pequeñas, incluye más de la mitad del presupuesto, unos 465 millones de euros, que beneficiaría a 1,5 millones de personas.
Entre las otras nueve líneas figuran un plan para el desarrollo de capacidades digitales de la administración pública, con medidas por 202 millones de euros; otro para jóvenes, por 152 millones de euros; y uno más para directivos, por 58 millones.
Para formación de mayores, se quieren destinar casi 10 millones; a los que se suman otros más de 11 millones para refuerzo de competencias para personal docente, entre otras.
Rodríguez Zapatero ha afirmado que estamos ante una oportunidad histórica para cambiar el modelo productivo, pero que para ello es necesario que el capital humano esté preparado técnicamente.
En España, los niveles de competencia básica son ligeramente inferiores a la media de la Unión Europea, con un 43 % de las personas entre 16 y 74 años, que carecen de ellas, frente a la media europea del 42 %.