Portugalete (Vizcaya), 16 jun (.).- UGT y el PSE-EE han homenajeado este viernes a Nicolás Redondo, el hombre clave del congreso de Suresnes (Francia) en el que se renovó el PSOE y que lideró la primera huelga general, del 14 de diciembre de 1988, contra un Gobierno socialista, el de Felipe González, al que él hizo secretario general del PSOE.
En el día en el que hubiera cumplido 96 años, la "familia" socialista se ha reunido en Portugalete (Vizcaya), donde residió desde que se casó hasta que se fue a Madrid, para recordar a Nicolás Redondo Urbieta, fallecido el pasado enero en Madrid.
El homenaje también ha contado con la presencia del presidente y del secretario de Organización del PNV, Andoni Ortuzar y el portugalujo Joseba Aurrekoxeta, y de la secretaria general de CCOO de Euskadi, Loli García, así como de los cuatro últimos secretarios generales del PSE-EE: Eneko Andueza, Idoia Mendia, Patxi López y su hijo, Nicolás Redondo Terreros.
Redondo Terreros ha agradecido especialmente al PNV que aceptara su invitación para asistir por la "intensa relación" que su padre tuvo con el PNV y ELA desde la clandestinidad en el franquismo, así como con el PCE y CCOO.
Ha destacado que, para su padre, la política era "pasión" y siempre hizo lo que consideró que debía hacer "hasta la última consecuencia".
REFUNDAR EL PSOE
Terreros ha explicado que su padre tuvo que tomar dos grandes decisiones en su vida: en 1972 y 1974 la de romper con el socialismo en el exilio, al que admiraba, para refundar el PSOE y la UGT y en 1987-1988 la de optar por UGT frente al Gobierno de Felipe González con su renuncia como diputado y la posterior convocatoria de la huelga general.
Ha recordado que en Suresnes Nicolás Redondo tuvo que hace un "esfuerzo extraordinario en contra" de su candidatura para "imponer que fuera Felipe González, que no era muy conocido entonces", el elegido como secretario general del PSOE, aunque con los años acabaran enfrentados.
"Eligió al mejor, con Felipe, Alfonso (Guerra) y él hicieron la época más brillante del Partido Socialista, fue el momento más trascendente del PSOE", ha opinado.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha destacado la "humildad" de Redondo y su "fidelidad" a UGT.
"Respetaba tanto a la UGT que era incapaz de hacer nada que pudiera a alguien hacer pensar que enmendaba la plana a la dirección del sindicato" y ha puesto como ejemplo que a él le ha pedido permiso para conceder entrevistas o publicar artículos, que le daba a leer de forma previa.
HUELGA 14D
Aunque ha considerado que la huelga del 14 de diciembre de 1988 fue un "hito histórico", Álvarez ha destacado que, además de la demostración de la autonomía sindical de UGT, el legado de Nicolás Redondo es la concertación social con patronal y gobierno (firmó el Estatuto de los Trabajadores y los Pactos de La Moncloa).
El secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, también se ha referido a la huelga del 14D. "Visto en perspectiva, creo que aquella jornada fue un día del que tenemos que sentirnos profundamente orgullosos todos los socialistas", ha dicho.
"Fue necesario y Nicolás tuvo el valor y el arrojo de comprenderlo y liderarlo. Nunca permitió -ha apuntado- que ninguna de las dos organizaciones hermanas, pero no siamesas, se impusiera a la otra. Sabía que eso sería el fracaso de la lucha".
En su opinión, Nicolás Redondo, al que ha considerado como el "padre" junto a Marcelino Camacho (CCOO) de la negociación colectiva en España, fue "un gran socialista, nadie puede ponerlo en duda, pero, sobre todo, fue un gran ugetista".
En el homenaje también han intervenido la consejera de Trabajo, Idoia Mendia, en representación del Gobierno Vasco y el alcalde en funciones de Portugalete, que mañana será reelegido al tener mayoría absoluta, Mikel Torres.
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