Las acciones de AT&T (NYSE:T) subieron más de un 1,7% antes de la apertura de la bolsa el viernes tras un informe de los analistas de Oppenheimer, que iniciaron una nueva cobertura sobre las acciones de la empresa, elevando su calificación a "Outperform" desde "Perform" y fijando un objetivo de precio de 21 dólares.
Los analistas mencionaron que AT&T no se ha comportado tan bien como el mercado en general y sus competidores directos en los últimos años porque la empresa encontró dificultades mientras se transformaba para convertirse en un proveedor dedicado de servicios de conectividad.
"Creemos que estos factores adversos pertenecen ya al pasado, y la acción está preparada para beneficiarse de varias influencias positivas", entre ellas las importantes mejoras de la capacidad y el alcance de la red tanto en servicios móviles como de telefonía fija, "que conducen a un aumento de los ingresos medios por usuario (ARPU)", señalaron.
"Contribuyen a ello las tendencias favorables en el número de clientes de banda ancha y en los ingresos, apoyadas por la expansión de las redes de fibra óptica y ahora también por el acceso inalámbrico fijo (FWA)", afirmaba Oppenheimer en su análisis.
Otros aspectos beneficiosos son la posible consolidación de DirecTV con Dish, el énfasis estratégico en la reducción de costes para mejorar el flujo de caja libre y reforzar el estado financiero, y una valoración atractiva con una rentabilidad del 15% sobre el flujo de caja libre (FCF) y del 7% sobre los dividendos.
El objetivo de precio de 21 dólares se basa en un múltiplo de ingresos previsto de 2,2 veces para el año 2025 y está respaldado por nuestra evaluación del flujo de caja descontado (DCF), que tiene en cuenta un coste medio ponderado del capital (WACC) del 8,9% y una tasa de crecimiento prevista a largo plazo del 0,5%.
Oppenheimer identificó como principales peligros para el objetivo de precio "el aumento de la competencia" y la posibilidad de que se reduzcan los márgenes y se ralentice el crecimiento del flujo de caja libre debido a cambios en los precios o en la cuota de mercado.
Otros posibles factores negativos incluyen "un mercado de banda ancha altamente competitivo con expansiones rivales de la red de fibra óptica, actualizaciones del sistema de cable a la tecnología DOCSIS 4.0, y Acceso Inalámbrico Fijo (FWA); y una exposición significativa a la industria del cable".
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