Por Julio Sánchez Onofre
Investing.com - El gobierno mexicano tiene un incentivo para concluir “con rapidez” el proceso de compra de 13 plantas de generación de energía eléctrica pertenecientes a la firma española Iberdrola (BME:IBE) por 5,943 millones de dólares (mdd), según el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O.
Durante la conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, en la ciudad de México, el funcionario explicó que si la transacción no concluye en el transcurso del 2023, tendrá que pagar a partir del próximo año un interés a Iberdrola por los ingresos recibidos de las plantas adquiridas.
“A partir del 1 de enero, así es como quedó en el memorándum de entendimiento, todos los flujos de ingresos de las plantas se acumulan en favor del Estado. El vendedor (Iberdrola) recibirá una tasa de interés anual de 3.6% por esos flujos en tanto no se cierre la compra”, sostuvo el funcionario, quien estuvo acompañado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Al exponer cómo será el proceso de compra y financiamiento, Ramírez de la O explicó que el valor anunciado por la transacción está sujeto a la verificación por parte del Estado mexicano de la operación de las plantas y a los ajustes correspondientes, un proceso que se encuentra en marcha.
“No es algo que estamos tomando a valor presente sino simplemente nos están diciendo lo que hay que hacer hacia adelante. Lo que hemos firmado es un memorándum de entendimiento, lo que nos permite comenzar a verificar y documentar, estamos en ese proceso”, insistió.
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¿Cómo se financiará la transacción?
Durante su exposición, el titular de la SHCP dijo que con el modelo planteado para la compra de Iberdrola, el Estado mexicano conservará la propiedad de las plantas a través de la aportación del 51% del capital de riesgo a través del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin).
“La operación la financia el Fonadin, que es una aportación del capital de 45,000 millones de pesos. Esta es una aportación que hace Hacienda al Fonadin para darle esa capacidad de financiar la compra. Esto es, 45,000 millones para el 51% del valor del capital en riesgo”, explicó.
Así, el funcionario negó que, para financiar la transacción, el Estado mexicano vaya a recurrir a endeudamiento, como se ha especulado.
“Nosotros tenemos el dinero en disponibilidad, en la chequera, sacamos dinero de la chequera nuestra, no estamos recurriendo a deuda, y estamos comprando un activo que produce flujo”, sostuvo Ramírez de la O.
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En tanto, habrá un financiamiento soportado por los flujos mismos del proyecto equivalente a 66,500 millones de pesos.
El funcionario detalló que para llevar a cabo la operación, el Fonadin será el adquirente y, por debajo, estará un vehículo desarrollado específicamente para el financiamiento de la compra.
“Ese vehículo va a dar un contrato a la empresa MIP (Mexico Infrastructure Partners), el fondo mexicano de infraestructura que es una empresa especializada en administrar estos activos, pero solo como administrador, el Fonadin se asegura que tienen la mayoría del control de los activos de capital de riesgo y por lo tanto de los vehículos que se desprenden para este propósito”, comentó.
Según el funcionario, el financiamiento está más que asegurado e incluso dijo que, sin conocer los detalles, “los bancos grandes han venido a ofrecer financiamiento porque saben que esta es una operación bastante atractiva para ellos”.