Madrid, 29 may (.).- Coxabengoa, la compañía resultante de la adquisición por Cox Energy de activos de la extinta Abengoa (BME:ABGek), obtuvo un beneficio después de impuestos de más de 55 millones de euros en su primer año de funcionamiento, entre mayo de 2023 y abril de 2024.
En un encuentro con EFE, su presidente, Enrique Riquelme, y su consejero delegado, Nacho Moreno, han hecho balance del primer año de andadura de la compañía creada con los activos que se liquidaron de Abengoa y que se adjudicó en abril del año pasado, decisión que fue confirmada por el juez el 31 de mayo de ese año.
En su primer año de vida, Coxabengoa ha obtenido unos ingresos de más de 800 millones de euros y un resultado bruto de explotación (ebitda) de más de 150 millones, con un ratio de deuda neta sobre ebitda de -0,2 veces, gracias a su generación de caja.
Además, ha conseguido una contratación de más de 1.200 millones de euros hasta la fecha y en el conjunto de 2024 esperan superar los 2.000 millones, en línea con su plan estratégico.
También ha ampliado el número de empleados, pasando de los 9.000 que había cuando Cox Energy se hizo con los activos de Abengoa a 11.500 en la actualidad.
Riquelme explica que el afán prioritario fue preservar el empleo, que era el principal compromiso de Cox Energy, y no sólo se ha preservado, sino que ha crecido más de un 20 %.
Respecto a la contratación, señala que, cuando asumieron los activos de Abengoa, uno de los "cuellos de botella" que había era la falta de carga de trabajo.
La empresa, presente en 34 países de cuatro continentes, tiene actualmente una capacidad instalada de desalación de 4,4 millones de metros cúbicos al día y una capacidad instalada de desalación en concesión de 335.000 metros cúbicos al día.
En energía, cuenta con una capacidad de generación de 3,6 GW y 27.000 kilómetros de líneas de transmisión construidas.
Superado el objetivo de ebitda
Riquelme ha destacado como en este primer año se han superado los objetivos que se habían marcado, por ejemplo el de ebitda, que era de 100 millones, frente a los 150 millones que finalmente se han alcanzado en el primer año de Coxabengoa.
Para 2024 el objetivo es superar los 175 millones de euros de ebitda, para luego llegar a los 600 millones en 2027, tal y como contempla el plan estratégico, con 3.000 millones de ventas, y que ese año dos tercios o el 70 % del ebitda recurrente proceda de sus activos.
Riquelme, que recuerda que el plan estratégico de Coxabengoa fue presentado en septiembre del año pasado, ha señalado que en la actualidad Coxabengoa es una 'utility' de agua y energía, sus actividades principales, que están totalmente integradas en ingeniería, así como en la parte concesional y en la de operación y mantenimiento.
El presidente de Coxabengoa destaca que no hayan tenido que desinvertir en ni un sólo activo desde que crearon la compañía, sino que han seguido comprando y construyendo nuevos proyectos propios, a fin de seguir acumulando y generando ebitda recurrente a largo plazo.
Enrique Riquelme dice que la vocación de la compañía es seguir teniendo liderazgo en el negocio de todo el ciclo integral del agua, pero principalmente en desalación; mientras que en energía se centran en generación renovable y líneas de transmisión, además de seguir acumulando concesiones y activos propios que generen un ebitda recurrente.
En el caso de la desalación, el presidente de Coxabengoa destaca la puesta en operación hace dos meses de la mayor planta desaladora solar del mundo en Taweelah, Abu Dabi, así como la de Jubail, la mayor desaladora de Arabia Saudí.
Por otro lado, ha señalado que han vuelto a hacer competitiva Abengoa y, bajo su nueva denominación, Coxabengoa han ido adquiriendo poco a poco credibilidad en el sector financiero, "donde vuelve a apoyarnos la banca tanto nacional como internacional con avales y con financiación".
Ha indicado que son conscientes de que por mucho que a Coxabengoa le gusten muchas de las oportunidades que venga, tiene que seleccionar porque está recuperando poco a poco en el mercado, en el sector financieros y en todos los actores del ecosistema en que se mueve la "credibilidad".
No obstante, ha dicho que están superando las expectativas que tenían respecto al apoyo de los bancos tanto nacionales como internacionales.