Madrid, 3 nov (.).- El Círculo de Empresarios ha reclamado este viernes que los "posicionamientos ideológicos" no aboquen al cierre de las plantas nucleares ya instaladas y operativas, puesto que alargar su vida útil garantiza la estabilidad del sistema eléctrico español.
"Los posicionamientos ideológicos no deben distraer de la necesidad del alargamiento de la vida útil de la generación ya instalada que garantiza la estabilidad del sistema", ha defendido la organización para la defensa de los intereses empresariales.
A su juicio, la eficiencia de las inversiones del sector energético es una condición para que el coste final de la energía no sea un "lastre que perjudique la competitividad de los consumidores".
En la presentación de este viernes de un informe sobre la reforma del mercado eléctrico, el presidente del Círculo de Empresarios, Manuel Pérez-Sala, ha asegurado que en materia de transición energética tiene haber un consenso entre el sector privado y las administraciones públicas que "garantice la seguridad jurídica" y que haga de este un proceso "estable y transparente".
Según los datos del informe, la participación de la electricidad en el consumo final de energía debería pasar del 23 % actual a ubicarse alrededor del 30 % para cumplir con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), aunque la demanda eléctrica solo vaya a aumentar aparentemente un 1 % para ese año.
Este último dato se explica, según Nemesio Fernández-Cuesta, exsecretario de Estado de Energía y uno de los responsables del informe, a que España pasará a tener un superávit de producción de unos 70 teravatios que será exportado principalmente a países como Francia y que podría ser una ventaja y oportunidad económica para el país.
Para ello, reclaman que el sector no sufra una vez más la pérdida de 7.000 millones de euros derivada de "decisiones políticas del pasado", como las relativas a las energías renovables.
El informe certifica que para poder ser más competitivos los precios de la electricidad tendrán que reducirse, al tiempo que las inversiones para tecnologías, como el bombeo hidraúlico, que permitan un almacenamiento mayor de energía, tendrán que elevarse.
Desde el Círculo reclaman también que el libre mercado determine qué tecnologías son las más competitivas y que no sea la normativa la que defina cuales utilizar.
Además aconsejan que se realice un mecanismo de apoyo a los consumidores más vulnerables para la "modificación de sus hábitos de consumo y la minoración del impacto de los costes de la energía en sus presupuestos”.