Almudena Álvarez
Hornillos de Cerrato (Palencia), 10 may (.).- Con 175 habitantes, piscinas, pistas de padel, fibra óptica, taxista y cursos de buceo, la localidad palentina de Hornillos de Cerrato quiere demostrar que la energía eólica sopla a favor de la España vaciada.
Los molinos de viento han traído al municipio prosperidad, empleo y 400.000 euros anuales de ingresos extra que están sirviendo para fijar población gracias a los servicios que se prestan y que han cambiado la vida de sus vecinos.
A simple vista Hornillos de Cerrato está rodeado de aerogeneradores, pero al pasear por sus calles sorprende que un pueblo de 175 habitantes esté tan lleno de vida.
Un grupo de albañiles trabaja en la construcción de varias viviendas, dos jardineros cuidan las zonas verdes y en el bar están preparando comida para 30 personas. Puede decirse que, a diferencia de otros pueblos de la España vaciada, aquí se oye la vida.
Hornillos de Cerrato forma parte del 13% de municipios y del 0,01% del territorio nacional donde hay parques eólicos, dentro de una comunidad, Castilla y León, que está a la cabeza en producción de energía eólica con 273 parques, 6,6 GW instalados, más de 1.700 puestos de trabajo y 776 millones de euros de aportación al PIB; y dentro de un país "puntero y muy innovador" que se sitúa como el tercer productor de Europa de eólica y el sexto del mundo con 30 GW instalados.
"Creemos que la sociedad tiene que estar mejor informada sobre la energía eólica", explica a EFE Carlos Martí, portavoz de la plataforma Vientos de futuro, que este miércoles ha organizado una visita para conocer el parque Celada Fusión "un ejemplo de innovación en España" construido por Acciona (BME:ANA) en terrenos de Baltanás, Herrera de Valdecañas y Hornillos de Cerrato, en la provincia de Palencia.
Esta plataforma, formada por 40 asociaciones de todo tipo, está abriendo a la sociedad el debate sobre el desarrollo "ordenado" de la energía eólica en España, vista como "una gran oportunidad económica, pero que tiene que ir acompañada también de una integración en el territorio y de un consenso social", ha asegurado Martí.
En este sentido el portavoz de Vientos de futuro ha querido señalar que los 1.300 parques (23.000 aerogeneradores) que hay instalados en España "llaman mucho la atención visualmente pero ocupan un porcentaje pequeñísimo del territorio".
Un 0,01% de la superficie nacional en el 13% de los municipios que hay en España y sin embargo evitan la emisión de 30 millones de toneladas de CO2 al año en España, tienen un impacto neutro en el entorno y generan un desarrollo socioeconómico.
Puede decirse que, además de convivir con otras actividades como la agricultura, la ganadería o el sector forestal, la energía eólica contribuye a mejorar la calidad de vida en el medio rural con los ingresos que aporta a los municipios donde se instala, por lo que "directamente lucha contra la despoblación y el cambio climático", ha señalado Martí.
En Hornillos de Cerrato la energía eólica ha supuesto "un antes y un después". Lo dice su alcalde, Ignacio Valdeolmillos, en declaraciones a EFE.
Hace ocho años este pueblo del Cerrato palentino tenía poco más de cien habitantes y vivía prácticamente de la agricultura, pero los molinos de viento empezaron a poblar sus cerros y cambiaron la vida de sus habitantes.
Hoy los ingresos generados por el parque eólico han multiplicado por cinco el presupuesto del Ayuntamiento (535.000 euros en 2022) y con ello los servicios con los que se ha dotado al municipio, lo que ha hecho que "la calidad de vida de los vecinos haya mejorado notablemente", asegura el alcalde.
Pero además se ha creado empleo y se ha incrementado la población que ha pasado de 110 a 175 personas en solo ocho años en un pueblo que se dedica “a la gente", como afirma el alcalde.
"Todo sale de la energía eólica", afirma el alcalde que ve en la eólica una oportunidad para la España vaciada, con muchos beneficios y ningún inconveniente, desde el punto de vista de este agricultor que ve cómo escasea el agua para el riego y el pesimismo envuelve a muchos pueblos vecinos.
"Solo podemos decir cosas buenas, nuestro pueblo ha cambiado y somos la envidia de otros", sostiene Valdeolmillos que no se imagina un futuro para su pueblo sin molinos de viento.
"Sin aerogeneradores es muy probable que el ayuntamiento de Hornillos estuviera ya en Torquemada porque se habría ido mucha gente", asegura. “Y nosotros hemos hecho hasta cursos de buceo en las piscinas, ¿por qué no?", concluye el alcalde.
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