Madrid, 27 oct (.).- El presidente de Seopan, patronal que agrupa grandes constructoras y concesionarias de infraestructuras, denuncia que al ritmo de los últimos cinco años la inversión no recuperará su nivel precovid hasta 2033, unos valores que a día de hoy ya han recuperado países europeos como Francia o Italia.
Asimismo, ha señalado que en términos de ratio España es el último país de la Unión Europea, lo que ha generado un importante "stock" de infraestructuras que está deteriorando la competitividad y la productividad del país, ampliando al mismo tiempo la brecha con los países europeos de nuestro entorno.
Coincide en este diagnóstico la presidenta de la Asociación Nacional de Constructores Independientes (ANCI), Concha Santos, que lamenta que España haya perdido 10 años de inversión y esté destinando mucho menos de lo que debe, un déficit que tiene sus consecuencias.
Por ello, ha defendido que se invierta de manera estable, suficiente y sostenible a lo largo de los años y con carácter independiente de los ciclos políticos y económicos.
En la misma línea se ha pronunciado la secretaria general de la patronal de ingeniería Tecniberia, Araceli García, y el presidente del Instituto de la Ingeniaría de España, José Trigueros, en el marco de la presentación del informe "Infraestructuras 2023".
"Nos hace falta más dinero para inversión en infraestructuras, los ingenieros queremos y sabemos y muchas veces, por falta de financiación, no podemos", ha lamentado el también presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos.
España, con una nota del 6,9 en obra pública
De acuerdo con el informe de infraestructuras, España saca una nota del 6,9 en la valoración de la obra pública, iguala así a Alemania o Francia pero está por debajo de otros europeos como Bélgica (7,5) o Países Bajos (9,5).
España, que supera el 6,5 que logró en 2019, antes de la pandemia, obtuvo una nota de 8 en puertos; de 7,1 en aeropuertos y transporte público urbano; de 6,9 en ciclo del agua; del 6,4 en carreteras y del 5,8 en ferrocarriles, de acuerdo con los indicadores objetivos, en los que la falta de financiación es una dominante en todos ellos.
En carreteras, aunque destaca por capacidad y seguridad, requiere mejoras en la financiación, accesos a grandes ciudades, puertos y nodos intermodales, así como en la planificación a medio y largo plazo.
También se observan bajos datos en financiación, operación y mantenimiento ferroviario, aunque España destaca en la dotación de alta velocidad, en líneas electrificadas por cada 1.000 habitantes o en el bajo números de pasos a nivel.
En puertos está entre las primeras posiciones en tráfico, aunque en adaptación al futuro está más retrasada que otros países europeos, mientras que en el ciclo del agua destaca en cobertura pero presenta deficiencias en regulación e interconexión.
En transporte público urbano saca un suficiente, necesita más financiación, planificación futura y mejora de la logística en las ciudades, en tanto que a nivel aeroportuario aún no se ha recuperado la inversión.