Madrid, 27 oct (.).- Las empresas funerarias facturaron 1.653 millones de euros en 2022, un 1,44 % más que el año anterior (23 millones más), según el último informe publicado este viernes por la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef).
Esta asociación, que representa a las empresas prestadoras de más del 70 % de los servicios funerarios en España, estima que el 58 % de la factura funeraria es propia de la actividad (arca, traslados, permisos y gestiones varias).
El resto de partidas facturadas se distribuyen entre el pago de impuestos indirectos como el IVA (el 14,9 %), el destino final en cementerio y cremación (14,3 %) y servicios complementarios como coronas o lápidas (12,8 %).
En relación con el gasto en impuestos, Panasef reclama en una nota una bajada del IVA, dado que el tipo impositivo (21 %) que grava los servicios funerarios asegura que es "similar al de los artículos de lujo".
El informe, basado en una encuesta a los asociados (un 60 % del volumen del sector) detalla que las empresas funerarias emplean a 12.433 personas (un 1,2 % más en tasa interanual), de las cuales casi el 70 % son hombres. No obstante, en 2022 la ocupación femenina aumentó un 5 % respecto al año anterior, hasta el 35 % actual.
El número de incineraciones realizadas en España se mantuvo estable en 2022 respecto a 2021, ya que el 44,99 % de los fallecidos fueron incinerados frente al 55,01 % que fueron inhumados.
El número de fallecimientos el año pasado ascendió a 463.133 personas, según los datos provisionales del INE que ha recabado el estudio, lo que supone un 2,75 % más que en 2021.
En comparación con 2022, este año la patronal observa, de manera provisional, aproximadamente 12.000 defunciones menos, con una curva de decesos mucho menos pronunciada en los meses de enero, mayo y junio, para unas cifra final similar a la registrada en los años anteriores a la pandemia.