Sevilla, 25 oct (.).- Madrid es la comunidad más cara de España para pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) mientras que Extremadura es la más económica, según un análisis de Facua que ha detectado diferencias de hasta un 251,6 % en las tarifas de la ITV obligatoria para los turismos con motor de gasolina y de un 347,8 % en los diésel en función de la región.
El precio medio de la ITV en las diecisiete comunidades es de 35,45 euros para los turismos de gasolina (un 3,1 % menos que en 2022) y de 43,01 euros para los equipados con motor diésel (un 1,7 % menos), unos descensos debidos principalmente a las rebajas en la comunidad Valenciana y en Extremadura.
Así, las tarifas de ITV en la Comunidad Valenciana se han visto disminuidas tras la recuperación del servicio por parte de la administración pública (tras años de privatización) y la eliminación de la prueba de ruidos, mientras que el Gobierno de Extremadura ha decidido bonificar hasta en un 50 % los precios durante este 2023.
La Comunidad de Madrid, donde el servicio está liberalizado y las tarifas se fijan sin regulación autonómica, es el territorio con el precio de ITV mas alta para los turismos de gasolina, 51,44 euros de media, y diésel (65,51 euros).
Le siguen Euskadi con 50,91 euros (que repite en segunda posición), y Ceuta (50,14 euros), que también ocupó el tercer lugar en 2022.
Las tarifas más económicas corresponden este año a las estaciones de Extremadura, de 14,63 euros para las estaciones de la Administración y 18,58 para las privadas ( convive un modelo mixto), seguida de Mallorca (en Baleares la gestión depende de cada Consejo insular) con 17,01 euros; de Andalucía (26,19 euros para los vehículos de menos de 1.600 centímetros cúbicos y 35,40 euros en el resto) y Murcia (26,48 euros en la única estación explotada directamente por el Gobierno autonómico, en la localidad de Alcantarilla).
En cuanto a los diésel, la Comunidad de Madrid sigue siendo la más cara, con 65,51 euros, seguida de Ceuta (59,48 euros), las estaciones privadas de Murcia, con 53,46 euros, y Cantabria (53,24 euros).
Las tarifas más bajas para las ITV de los turismos diésel corresponden a las estaciones de Extremadura (14,63 euros para las de la Administración y 18,58 para las privadas), las de Andalucía para turismos de menos de 1.600 cc. (30,79 euros), las de Mallorca (30,92 euros) y la estación pública de Murcia (35,08 euros).
Según el análisis de Facua, un tercio de las tarifas han sido congeladas y no sufren variaciones respecto de 2022, mientras que otras dos -Extremadura y Comunidad Valenciana-, bajan con respecto al año pasado.
La mayor subida se ha dado en la tarifa de la estación pública de Alcantarilla, en Murcia, un 18,7 % para los turismos de gasolina, seguida de La Rioja con un 14,2 %, y las privadas de Murcia, con un 11,8 %.
En la mayor parte de las comunidades autónomas existe el régimen de concesión pública para la explotación de las estaciones de ITV, salvo en Madrid, donde son privadas, y algunas otras en las que las explota directamente la administración autonómica a través de empresas públicas como en Andalucía (Veiasa) o Asturias (Itvasa).