Nueva York, 5 feb (.).- Wall Street cerró este lunes en rojo y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, bajó un 0,71 % coincidiendo con un repunte en el rendimiento de los bonos estadounidenses de referencia, a 10 años, hasta el 4,16 %.
Al cierre de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones se situó en 38.380 puntos, mientras que el S&P 500 cedió un 0,32 %, hasta 4.943 unidades.
Por su parte, el índice Nasdaq, en el que cotizan las grandes tecnológicas, perdía un 0,20 %, hasta 15.598 puntos.
El parqué neoyorquino se tomó un respiro tras cerrar una buena semana y un buen mes de enero impulsados por los espectaculares resultados de las cinco grandes tecnológicas del país, que elevaron al S&P 500 hasta cotas nunca vistas.
Según algunos analistas, los inversores volvían este lunes a centrarse en la trayectoria de los tipos de interés y, tras asumir que la Reserva Federal (Fed) emprenderá recortes más tarde de lo deseado, ahora temen que esos recortes sean flojos.
El presidente de la Fed, Jerome Powell dijo el domingo en una entrevista para el programa ‘60 Minutes’ de CBS que el banco central espera más pruebas de que la inflación se acerca a su meta del 2 % para comenzar con los recortes de tipos.
Mientras tanto, este lunes publicó sus resultados la cadena estadounidense de comida rápida McDonald's, que pese a aumentar sus beneficios un 37 % en 2023, no convenció a Wall Street con sus resultados del trimestre más reciente.
McDonald's fue la más perjudicada del Dow Jones, con una caída del 3,7 %, seguida por 3M (NYSE:MMM) /-2,3 %) y Walgreens (NASDAQ:WBA) (-2,1 %). Solo subieron media docena de cotizadas, destacando Caterpillar (NYSE:CAT) (2 %) y Apple (NASDAQ:AAPL) (1 %).
Por sectores, predominaron las pérdidas y estuvieron encabezadas por las empresas de materiales básicos (-2,5 %) y servicios públicos (-2 %), frente a las ganancias de las tecnológicas (0,6 %) y sanitarias (0,3 %).
En otros mercados, el petróleo de Texas subió a 72,78 dólares el barril, y al cierre de la Bolsa, el oro caía hasta los 2.041 dólares la onza, mientras el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,0738.