Mateo Sancho Cardiel
Nueva York, 22 sep (EFE).- Wall Street volvió hoy a quemar los muebles y el Dow Jones bajó casi 180 puntos en otra jornada en la que el panorama internacional fue poco halagüeño, con malos datos en China y la caída de Volkswagen (XETRA:VOWG) en Alemania, lo que repercutió en la incertidumbre sobre el futuro de los tipos de interés en EE.UU.
Como en la película de los hermanos Marx "Go West", los inversores parecían ir en un tren a toda velocidad y, al grito de "más madera", echando más leña al desastre.
Los tipos de madera eran dos: una de bambú chino, que quema rápido, y otra más sólida del parque de Tiergarten en Berlín, donde Volkswagen causó un auténtico incendio forestal.
La primera fue encendida por el Banco Asiático de Desarrollo, que rebajó hoy su previsión de crecimiento para China en 2015 hasta el 6,8 %, y un informe de economistas estatales vaticinó que el PIB subirá un 6,9 %, con lo que el Gobierno no cumpliría su objetivo de crecimiento anual del 7 %.
La segunda ardió en los talleres del fabricante automovilístico alemán Volkswagen, que se ha desplomado en dos días un 36,5 % por la manipulación de emisiones contaminantes en vehículos con motor diésel.
Este incendio se propagó a toda Europa dejando en cenizas varios parqués que dependen de esta madera: Fráncfort cayó un 3,8 %, París un 3,42 %, Milán un 3,33 %, Madrid un 3,11 % y Londres un 2,83 %.
A Estados Unidos más que fuego llegó humo, pero un humo espeso que hacía imposible ver cuándo podrá la Reserva Federal (Fed) subir de una vez los tipos de interés que marcan el fin de una época de políticas de estímulo iniciadas con la crisis de 2008.
Este desenlace estaba previsto para la semana pasada, pero las circunstancias internacionales hicieron a la presidenta de la Fed, Janet Yellen, demorar una vez más la decisión. Y si ayer, precisamente, había algo de optimismo con que sería una dilación mínima, los datos de hoy vuelven a encender la mecha de la preocupación y el eterno postergar.
Quedaron incinerados, entonces, más de un 1 % de las cotizaciones del Dow Jones, un 1,23 % de las del S&P 500 y un 1,50 % en el Nasdaq, si bien las llamas fueron controladas a lo largo de la sesión, pues el incendio había llegado a ser más preocupante todavía.
Finalmente, con la madera como combustible, tampoco fue un buen día para el combustible principal, el petróleo, que cayó un 1,82 % y cerró en 45,83 dólares el barril, llevándose consigo al sector de las materias primas (que bajó un 2,86 %) y al energético (que perdió un 1,5 %).