MADRID (Reuters) - La Policía detuvo el martes de madrugada en Ceuta a dos presuntos yihadistas que formaban parte de una célula "permanente y dispuesta para atentar", informó el Ministerio del Interior en un comunicado.
Los dos arrestados en la operación, continuación de otra que el pasado 24 de enero se saldó con la detención de cuatro miembros de la misma célula, son hombres de nacionalidad española y origen marroquí y residían en la barriada ceutí de El Príncipe.
"El grupo desarticulado estaba plenamente operativo e integrado por individuos ya radicalizados y concienciados en la posible ejecución de atentados tanto en nuestro país como en los del entorno", dijo Interior en su comunicado.
España ha reforzado sus medidas de seguridad para tratar de evitar la radicalización de ciudadanos musulmanes jóvenes, después de los ataques ocurridos a principios de año en París, donde grupos de islamistas mataron a 17 personas.
Según el ministerio, los dos últimos detenidos, así como los cuatro anteriores, tienen perfiles que coinciden con los de los autores de los atentados en la capital francesa, caracterizado por un "alto nivel de radicalización y potencial peligrosidad".
Los seis formaban parte de la misma célula y seguían las directrices impartidas por el líder de DAESH (acrónimo en árabe para el grupo extremista Estado Islámico), mediante una campaña de difusión mediática poderosa y agresiva en redes sociales y páginas web yihadistas, explicó Interior.
"Tenían acceso a la adquisición de armas de fuego en el mercado negro y una clara predisposición para su uso en un potencial atentado terrorista", agregó el ministerio, que explicó que en el registro del domicilio de uno de los detenidos en enero se incautó una pistola.
Según Interior, los arrestados estaban preparados física y mentalmente para la 'yihad' y adoptaban muchas y complicadas medidas de seguridad en sus desplazamientos y sus comunicaciones.
El mes pasado, el Congreso español aprobó una modificación del Código Penal con la que pretende hacer frente al yihadismo, en momentos en que Europa sufre un aumento del radicalismo islamista.
Según datos del Ministerio del Interior, siete de cada 10 condenados por yihadismo en España entre 1996 y 2012 se habían radicalizado total o parcialmente en este país.