WASHINGTON (Reuters) - Los encargados de definir las políticas en todo el mundo deben emprender con mayor seriedad las reformas económicas o podrían ver a sus economías atascadas en un crecimiento mediocre y desordenado con alta deuda y desempleo, dijo el jueves la jefa del Fondo Monetario Internacional.
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, dijo que su consejo no había cambiado mucho desde hace seis meses -la última vez que los ministros de Finanzas del mundo y los banqueros centrales coincidieron en Washington para los encuentros del FMI y el Banco Mundial- pero que más amenazas se perfilaban en el horizonte.
"La última visión sobre la economía global se ve desagradablemente familiar: una recuperación dispar, precaria, con un crecimiento por debajo de lo esperado y con cada vez más riesgos a la baja", dio Lagarde en su "Agenda de Política Global" que enumera las prioridades para el FMI y sus 188 miembros.
En su Panorama Económico Global divulgado esta semana, el FMI recortó las proyecciones por crecimiento económico por tercera vez este año, al 3,3 por ciento en 2014 y el 3,8 por ciento en 2015, advirtiendo de una evolución más débil en los países centrales de la zona euro, en Japón y en grandes mercados emergentes como Brasil.
"Es necesario colocar mayor énfasis entre los miembros en lo que respecta a políticas destinadas a impulsar decisivamente el potencial de crecimiento actual de hoy y el de mañana", dijo Lagarde.
El FMI ha advertido que la zona euro, en particular, corre el riesgo de caer en una ciénaga de bajo crecimiento a medida que lucha con un alto desempleo y una baja inflación.
La jefa del FMI elogió los planes recientes del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de comprar deuda empaquetada para impulsar la vacilante economía Europea, pero sostuvo que el BCE debería estar dispuesto a hacer más si los precios no comienzan a subir.
"Si el panorama de inflación no mejora y las expectativas continúan inclinándose a la baja, el BCE debería estar dispuesto a hacer más, incluyendo la compra de bonos soberanos", dijo.
Lagarde ha estado promoviendo profundas reformas económicas al menos en los últimos dos años, aunque los esfuerzos por poner en marcha acciones tangibles en la zona euro han sido frenadas por la renuencia de Alemania a respaldar el estímulo monetario.
Lagarde dijo que Alemania y Estados Unidos, en particular, tienen espacio para invertir más en proyectos de infraestructura que fortalezcan el crecimiento.