Por Jesús Aguado
MADRID (Reuters) - El exdirectivo de JPMorgan (NYSE:JPM) Javier Martín-Artajo reclamado por la justicia estadounidense por presuntos delitos fiscales y de fraude defendió el jueves su inocencia a pesar de que la Fiscalía sí vio motivo para atender la solicitud de extradición.
"Me considero inocente porque no he podido hacer esto, ni podía hacerlo ni lo he hecho, no tengo motivos para hacer esto", dijo Martín-Artajo en una vista en la Audiencia Nacional.
El juez Antonio Díaz Delgado, de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal, tiene previsto tomar una decisión en los próximos días o semanas sobre si accede a la petición de extradición, según fuentes judiciales.
Los delitos de los que se le acusa en Estados Unidos se enmarcan dentro del escándalo conocido como "ballena de Londres", que generó unas pérdidas de trading de 6.200 millones de dólares.
La fiscalía de Manhattan presentó en agosto de 2013 cargos de fraude electrónico y conspiración para falsificar cuentas contra el español Martín-Artajo y el francés Julien Grout.
El escándalo de JP Morgan estalló en 2012, cuando Jamie Dimon, el consejero delegado de la entidad bancaria, se vio forzado a admitir en público el desfase de cuentas. Entonces, Martín-Artajo era directivo de JP, con sede en Reino Unido.
Precisamente, el exdirectivo español de JP Morgan consideró este jueves que su condición de ciudadano español y arraigo en este país, así como la circunstancia de que los hechos por los que se le imputaba hubieran ocurrido en el Reino Unido y no en Estados Unidos eran motivos suficientes para no atender la solicitudad de extradición.
El exdirectivo de JP Morgan consideró además que las penas máximas de cárcel de hasta 95 años a las que se podría enfrentar en el peor de los casos en Estados Unidos por estos delito eran "absolutamente desproporcionadas", teniendo en cuenta que por estos mismo delitos en España las penas son apenas una sexta parte, según su abogado defensor.
FISCAL SÍ VE MOTIVOS PARA ACCEDER A EXTRADICIÓN
En cambio, la responsable del Ministerio Fiscal basó el jueves en parte su decisión para acceder a la solicitud de extradición en la corresponsabilidad de Martín-Artajo para hacer ajustes en gestión de la cartera sintética que invirtió en deuda pública y en el hecho de que instruyera a otros empleados para alterar a manipular y disfrazar pérdidas por aproximadamente 767 millones de dólares en esta cartera.
"Entendemos que estos hechos son constitutivos, tal como se refleja en la documentación presentada por Estados Unidos, de los delitos de falsificación libros y registros contables, así como fraude de valores, que podía ser constitutivo de un delito societario o un delito fiscal o de falsedad documental", dijo el jueves la representante del Ministerio Fiscal.
En caso de que la Audiencia Nacional no acceda a dar vía legal a la solicitud de extradición, las autoridades estadounidenses podrían volver a reclamar esta petición.
En todo caso, en materia de extradición la última decisión corresponde al Gobierno español.