Por Alastair Macdonald y Philip Pullella
BRUSELAS/ROMA (Reuters) - Los líderes de la Unión Europea acordaron triplicar la finaciación para las operaciones de búsqueda y rescate en el Mar Mediterráneo, donde se está ahogando un número récord de inmigrantes que intentan escapar de los conflictos y la pobreza en Oriente Próximo y África.
La medida fue anunciada por la canciller alemana, Angela Merkel, tras una cumbre de emergencia de la UE en Bruselas, convocada el jueves después de que fallecieran hasta 900 personas por el hundimiento de una embarcación el domingo frente a las costas de Libia, un importante punto de salida de barcos ilegales en dirección a Europa.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo que el bloque examinaría formas de detectar y destruir embarcaciones que puedan ser utilizadas por contrabandistas, que se incrementarán los esfuerzos por evitar que los inmigrantes lleguen a Libia, mejorar el sistema de procesamientos de visado y asilo y retornando a sus países de origen a quienes no califiquen para el asilo.
"Queremos actuar rápidamente, de modo que triplicaremos los recursos financieros para las misiones relevantes de Frontex", dijo Merkel, en referencia a la agencia fronteriza de la UE.
"Respecto a Alemania puedo agregar: si resulta que los fondos no son suficientes vamos a tener que volver a hablar del tema", declaró.
En un hecho que atrajo la atención internacional, Naciones Unidas había criticado la respuesta europea hasta el momento y la exhortó a tomar más medidas.
"La respuesta de la Unión Europea debe ir más allá de la aproximación minimalista actual (...) que se centra principalmente en contener la llegada de inmigrantes y refugiados a sus costas", expresó la entidad.
MÁS BARCOS, PERO CON RESTRICCIONES
El primer ministro británico, David Cameron, que en elecciones a inicios de mayo se enfrentará a grupos que se oponen a la inmigración, prometió el portahelicópteros estrella de su flota y otras dos embarcaciones para una operación que previamente se había negado a respaldar por temor a tentar a más personas a aventurarse en el mar.
Sin embargo, remarcó que los que fueran rescatados no recibirán refugio automáticamente en Gran Bretaña y que la mayoría sería entregada a Italia, cuyo primer ministro, Matteo Renzi, dijo que es optimista respecto a que sus aliados europeos no dejaran que Roma siguiera esforzándose sola.
Mientras estaban reunidos, la guardia costera italiana recogió a 84 hombres, todos aparentemente de África subsahariana, de un bote de goma que se hundía a 35 millas costa afuera de Libia, tras recibir un llamado de auxilio.
Sólo hubo 28 sobrevivientes de la tragedia del domingo, aparentemente la peor registrada entre los inmigrantes que huyen por mar desde el norte de África hacia Europa.
En Malta se celebró un emotivo funeral interreligioso para los únicos 24 cuerpos recuperados del naufragio. Se sospecha que muchos de los pasajeros perecieron encerrados bajo la cubierta.
El líder religioso musulmán Mohammed el Sadi dijo que lo que ocurrió debe poner en evidencia los aprietos que viven los inmigrantes, mientras el obispo Mario Grech pidió una acción motivada por el amor, en vez de sólo por la ley.
Italia canceló el año pasado una misión que salvó la vida de más de 100.000 inmigrantes porque otros países de la Unión Europea se negaron a financiarla. Fue sustituido por un programa menor cuyo objetivo principal es patrullar las fronteras del bloque, después de que los países argumentaron que salvar a los inmigrantes alentaba a más personas a realizar la travesía.
"La Operación Tritón", con más de siete embarcaciones patrullando las costas italianas y un presupuesto mensual de 2,9 millones de euros, debería recibir ahora más dinero y barcos, al igual que una misión similar en las costas de Grecia, llamada "Poseidón".