Por Axel Bugge
LISBOA (Reuters) - Los portugueses podrían reelegir este domingo su gobierno de centro-derecha, aunque el nuevo ejecutivo podría no alcanzar la mayoría absoluta, lo que significaría un menor grado de estabilidad política tras años de austeridad por la crisis de la deuda.
Las elecciones de este domingo son las primeras desde que Portugal abandonó el año pasado el plan de rescate internacional. Pese a la política de fuertes recortes y subidas de impuestos récord, las encuestas apuntan a una victoria del gobierno, que ha implementado estas políticas para sacar el país de la crisis.
Los últimos sondeos publicados el viernes dieron a la coalición gubernamental del primer ministro, Pedro Passos Coelho, una ventaja de entre cinco y 12 puntos sobre su rival socialista Antonio Costa.
Pero si Passos Coelho no obtiene más que el 38 por ciento de los votos, no logrará la mayoría absoluta de los 230 escaños que forman el Parlamento portugués.
En las elecciones de 2011 su coalición ganó el 50 por ciento de los votos, lo que le garantizóla mayoría absoluto.
No hubo campaña el sábado, ni declaraciones de los candidatos, de acuerdo con la ley, que reserva la víspera de las elecciones como un día para la reflexión.
Costa tenía cerca del 33 por ciento de los votos en las últimas encuestas, lo que reduce sus posibilidades de ganar, aunque algunos analistas no descartan un rebote de última hora.
La incertidumbre sobre el resultado final es elevado ante el amplio porcentaje de los indecisos (en torno a un 15 por ciento de los votantes) y una eventual alta tasa de abstención.
Adelino Maltez, analista político de la Universidad Técnica de Lisboa, dijo que "hay una posibilidad de confusión en la noche del domingo," si hay un resultado que no da ninguna victoria clara a ninguna formación.
Un reparto casi equilibrado de los votos podría dificultar la formación de un gobierno estable y poner en peligro la senda de crecimiento que el país ha retomada tras los sacrificios sufridos durante la crisis de la deuda.
La economía salió de la recesión el año pasado y el crecimiento se está acelerando este año. Passos Coelho dice que sólo con su gobierno estable el crecimiento puede ganar pulso y la economía puede atraer las inversiones necesarias.
Costa, el ex alcalde de Lisboa, se ha comprometido a recortar la política de austeridad y aumentar los ingresos para
las familias.
"Es fundamental que cada uno de nosotros no pierda la oportunidad de usar el voto para cambiar el gobierno después de cuatro años", dijo Costa en su último acto de campaña.
Pero las encuestas han ampliado la ventaja del gobierno en las últimas semanas pese a los ataques implacables de Costa contra la política de austeridad introducido por la coalición de centro -derecha.
La eventual victoria para el gobierno de centro-derecha contrastaría también con la tendencia observada en otros países del sur de Europa, como España y Grecia, donde los gobiernos comprometidos con la austeridad han recibido un fuerte castigo en las urnas.