WASHINGTON (Reuters) - El Gobierno chino elogió el lunes la significativa disminución en las tensiones comerciales con Estados Unidos y dijo que es conveniente para ambas naciones alcanzar un acuerdo, al tiempo que medios locales celebraron lo que vieron como una negativa de Pekín a ceder ante las amenazas económicas de Washington.
Las declaraciones de China, emitidas tras discusiones la semana pasada, contrastaron con reacciones dispares de los jefes de empresas de Estados Unidos, ya que algunos se mostraron satisfechos por la distensión de la riña arancelaria y otros afirmaron que será difícil para Washington recuperar la oportunidad de encarar las polémicas políticas chinas.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China está "en pausa" luego de que los países accedieron a dejar de lado sus amenazas arancelarias para trabajar en un nuevo acuerdo más amplio, dijo el domingo el secretario del Tesoro Steve Mnuchin. [L2N1SR076]
El secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross, viajará a China la próxima semana para ayudar a finalizar un acuerdo comercial, dijo Mnuchin a periodistas el lunes.
En una entrevista previa con la cadena CNBC, Mnuchin indicó que los planes de aranceles de Estados Unidos estaban suspendidos. "Si esto no se arregla y no obtenemos lo que queremos, el presidente siempre puede encarrilar el asunto de los aranceles", declaró.
Pekín y Washington dijeron que acordaron seguir discutiendo medidas según las cuales China importaría bienes del sector agrícola y de energía de Estados Unidos para reducir el déficit comercial de 335.000 millones de dólares anuales que tiene con el país norteamericano.
El lunes, el presidente Donald Trump dijo en Twitter que China se había comprometido a comprar "grandes cantidades" de productos agrícolas estadounidenses. El mandatario republicano no detalló el plan.
En una rueda de prensa, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Lu Kang, dijo que ambos países claramente habían admitido que era beneficioso alcanzar un consenso. "China nunca buscó que hubieran tensiones con Estados Unidos, en comercio y en otros asuntos", destacó Lu.
Pero los medios chinos se apresuraron a destacar cómo el país supuestamente había defendido con éxito sus intereses.
Mei Xinyu, un asesor del Ministerio del Comercio, escribió una crónica para el diario People's Daily - controlado por el gobernante Partido Comunista - diciendo que al acuerdo había preservado el derecho de China a desarrollar su economía a su estilo.
El acuerdo también se centra en "el enfoque positivo" para elevar las importaciones en lugar de la "posición