París, 1 sep (.).- Todo iba bien en el parqué hasta que Estados Unidos divulgó unos indicadores económicos peor de lo esperado, que fueron la gota que derrumbó, entre otros, el índice estrella de París.
Pese al disgusto, el Cac-40 pasó en rojo apenas una hora, e incluso le dio tiempo de teñir de verde su cierre, eso sí, con un levísimo 0,03 %.
Hasta bien pasadas las 16.00 (14.00 GMT), el selectivo había vivido sin embargo periodos bastante alegres, sin dejarse afectar por la nueva y continuada caída del petróleo -que al cierre vendía ya el barril de Brent a 45,5 dólares-, ni por los índices manufactureros de la zona euro, no siempre tan sólidos como hubiese sido de desear.
Al final, tras flirtear en algunos momentos con los 4.500 puntos, aunque sin llegar a cruzar el umbral, y tras alcanzar un volumen de negocios de 3.142 millones de euros, similar al de la víspera, el índice parisino se despidió en 4.439,67 puntos, "nervioso", según los analistas.
A la espera sin duda de los últimos datos mensuales del empleo en Estados Unidos, que mañana podrían terminar de confirmar lo que el consenso da ya en París casi por seguro: que si suben este año los tipos de la primera economía mundial, no será antes de diciembre.
En este contexto, el grupo de ingeniería petrolera Technip (PA:TECF) fue el gran perjudicado del día y retrocedió un 2,11 %, mientras que títulos defensivos, como la operadora de telecomunicaciones Orange (PA:ORAN) (2,01 %) y el fabricante de lentes Essilor (PA:ESSI) (1,32 %), lideraron las bajas.
Al otro lado de la barrera, el banco BNP Paribas (PA:BNPP) encabezó las alzas, con un 2,69 %, seguido de la firma de vinos y espiritosos Pernord Ricard (2,33 %), tras anunciar hy un excelente beneficio neto anual -en aumento de un 43 %- y un nuevo plan de ahorro que justificó con una caída del 9 % del volumen de negocios en el mercado chino.