"La Fed inició hace tiempo el simulacro de una voladura controlada de Wall Street, que luego detuvo ante la alarma causada en los mercados. De nuevo ha vuelto a la carga. Hay un hecho que llama poderosamente la atención en nuestra gestora. Se trata de las últimas noticias económica USA. A nuestro entender no son indicativas de un cambio de sesgo en la política ultralaxa de la Fed por sí mismas. Por ello, consideramos que la máxima autoridad monetaria USA tiene en cuenta otros factores. Por ejemplo, que conforme pasa el tiempo las cañas de las reitaradas QE se están volviendo lanzas, ya con el equivalente al 30% del PIB estadounidense. Conforme pasa el tiempo entendemos que habrá más problemas con el mantenimiento de estas medidas que con su retirada paulatina. También hemos observado una contestación global a esta política: el alza manipulada del S&P500 ha hecho más ricos a los pocos ricos que ya existían y a los bancos de inversión correspondientes, pero no se ha transmitido al conjunto de la Sociedad, de la Economía. Se trata, por tanto, de un motivo de preocupación. Nunca la divergencia entre el estado de salud de la Economía y de las Bolsas fue tan grande, tan desmesurado", me dice el analista jefe de una importante gestora de fondos nacionales.
El siguiente gráfico muestra la actuación relativa del sector cíclico en la bolsa de EE.UU. representado por el índice Morgan Stanley Cyclical frente al Consumo básico representado por el Consumer Staples SPDR, y el S&P 500. Este es un buen indicador de la aversión al riesgo que tiene el mercado. Si el comportamiento relativo de estos dos sectores es favorable al cíclico, los inversores incrementan su apetito por el riesgo, lo cual es positivo para los índices generales. Si es el sector de consumo básico el que se comporta mejor, entonces la aversión al riesgo aumenta, lo cual es negativo para la renta variable a nivel general.
Como vemos en el gráfico adjunto, el indicador de comportamiento relativo tiene generalmente una relación directa con el S&P 500. Pero a veces se producen divergencias, como en 1999-2000, en 2001-2002, o la enorme divergencia entre 2010-2013. Normalmente estas divergencias tienen a corregirse, si son bajistas con caídas del indicador general, y si son alcistas con subidas.
Ahora tenemos una fuerte divergencia bajista que se está alargando en el tiempo. No se puede determinar cuando esta anomalía del mercado se corregirá, pero sin duda que lo hará con una caída importante del S&P 500. De hecho, ya ha sobrepasado la duración promedio de este tipo de divergencias sin producir el correspondiente ajuste, por lo que éste puede suceder en cualquier momento.