Como se aprecia en el gráfico el cruce entre el dólar estadounidense y el australiano continúa moviéndose dentro de un canal bajista y no hay indicios de un quiebre inminente del mismo. La única señal posible es que ya va un mes dentro de este canal; más de un mes ya sería un tiempo considerable y aumentaría las probabilidades de un quiebre.
Desde el nivel actual, en el día anterior al Viernes Santo y a la publicación del informe de empleo en Estados Unidos, encontramos como un nivel clave 1,0450. El quiebre con una confirmación, daría señal de que 1,0242 (mínimo de abril) fue un piso, al menos por unas semanas. En el corto plazo, una confirmación por encima de 1,0330 dotaría de momento alcista al cruce, aumentando las probabilidades de una aproximación a 1,0400.
Hacia la baja, cualquier movimiento brusco del viernes, podría llevar al par por debajo de 1,0200, pero la zona de 1,0150 – 1,0160 debería de contener las bajas. Niveles inferiores estarían indicando que se trata de un día fuera de lo común.