El pasado 31 de mayo, después de ver el gasto que supondría la finalización de la muralla que separaría México y EE.UU., Trump anunció la subida de impuestos a las importaciones de México con el fin de que el país azteca colabore con la causa y controle de una manera más rigurosa la migración ilegal que se produce hacia EE.UU. Este plan de escalada de aranceles constaba se los siguientes tramos: del 5% al 10% el 1 de julio, al 15% el 1 de agosto, al 20% el 1 de septiembre y al 25% el 1 de octubre.
Con el comienzo de este año, México se ha convertido en el principal socio comercial de EE.UU., habiendo realizado un total de 346.500 millones de dólares en comercio de artículos que iban desde automóviles hasta frutas y verduras, a la vez que la tensión entre EE.UU. y China se incrementaba. Por lo que, la subida de los aranceles habría afectado todavía en mayor medida a México por el encarecimiento de sus productos para pasarlos por la frontera, al igual que también podría haber afectado a EE.UU. al haberse convertido México en su principal socio comercial, debido a que un encarecimiento de los aranceles provocaría una subida del producto final puesto a la venta y esto a su vez una disminución de la demanda por parte del consumidor final.
Una manera de ver el gran efecto negativo que habría causado para el consumidor final de EE.UU. es viendo el consumo de frutas y verduras provenientes de México, Actualmente, los consumidores estadounidenses gastan 12.000 millones de dólares en estos alimentos. En el caso de que al final se produjese el aumento de los aranceles de hasta un 25%, el gasto se incrementaría en 3.000 millones adicionales, “si se mantuviese la demanda”.
Que al final no se haya cumplido el plan de escalada de aranceles sobre las importaciones de México tiene un efecto positivo en ambas economías, ya que facilita el comercio entre ambos países debido al no encarecimiento de los productos, favoreciendo el incremento de la creación de producto de ambos, del PIB de EE.UU y el de México.
Hasta donde se sabe del acuerdo, se desplegarán 6.000 efectivos de la creada Guardia Nacional a partir de hoy a lo largo de los municipios fronterizos con Guatemala. Por otro lado, se han establecido medidas para desmantelar las organizaciones de tráfico y trata de personas, al igual que redes de financiamiento y transporte ilegales.
Para los migrantes, el Gobierno mexicano se compromete a darles oportunidades de empleo, salud y servicios de educación, mientras que EE.UU. se compromete a acelerar la resolución de solicitudes de asilo.
Para ver los resultados que obtienen las medidas que se han puesto encima de la mesa, se ha establecido un periodo de 90 y en el caso de que no se cumplan las expectativas se tomarían medidas adicionales.