El mercado de divisas se movió con fuerza el jueves, tras las respectivas presentaciones de dos pesos pesados de la economía mundial, como son el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, y la presidenta de la Fed, Janet Yellen.
Draghi dio alguna pista firme de los próximos pasos que puede dar el BCE en el caso de que sea necesario: podría bajar a cero la tasa de interés, entre otras medidas, para reactivar una economía que se recupera a ritmo muy lento, pese a los buenos datos que presentó en materia de empleos España a principio de semana, que habían sido bien tomados por los mercados.
Asimismo, el funcionario expresó que el tipo de cambio del euro es un factor de preocupación y de riesgo para la economía local, toda vez que afecta las exportaciones de los países que componen la Eurozona.
Estos comentarios de Draghi, que llegaron sobre el final de su presentación y ante las preguntas de los periodistas presentes en el lugar, llegaron como un disparador para la venta de euros en todos los frentes. Así, la moneda única, que rozó 1,40 apenas inició Draghi su discurso, perdió terreno rápidamente, llegando sobre el cierre de la sesión americana a 1,3832, donde se topó, técnicamente, con la media móvil de 200 períodos.
La presentación de Yellen, en cambio, no dio lugar a sorpresas. Su alocución ante el Senado dejó en claro una vez más que piensa extender los planes de estímulo, que desde inicio de 2009 lleva a cabo la Fed, durante el tiempo que sea necesario, sin explicar, una vez más, sobre que base aumentará o no los tipos de interés en el futuro. Se descuenta, sin embargo, que la variable de la inflación, aún lejos de la meta del 2% anual, será la más importante. Mientras dicha meta no sea alcanzada, seguirán sobrando dólares y a un muy bajo costo.
En tanto, la libra Esterlina cayó ligeramente ante el dólar y el yen el jueves, luego de la publicación del anuncio de política monetaria del Banco de Inglaterra; aunque su baja parece obedecer más a que siguió, algo de lejos, al euro, que cayó en picada.
En el inicio de la sesión europea del viernes, el panorama de las principales divisas luce sin cambios relevantes respecto al cierre de la víspera. El euro mantiene una tendencia bajista frente al dólar, con un primer soporte en la zona de 1,3795, línea de tendencia alcista de mediano plazo medida en los gráficos diarios. El quiebre de la misma, podria determinar el inicio de un ciclo bajista de la moneda única, aunque la velocidad y, sobre todo, la cantidad de puntos que perdió el jueves, hacen algo improbable esta posibilidad. Una recuperación del euro tendrá resistencia principale en 1,3865, superada la cual, 1,3905 será el valor a seguir.
La libra Esterlina frenó su baja fuerte de los últimos tres días, en los que perdió gran parte de sus ganancias de inicio de semana. Su tendencia de corto plazo ante el dólar es bajista, aunque si el precio no cae de 1,69 rápidamente, donde aparece el primer y firme soporte del cruce, puede recuperar posiciones durante las próximas horas, máxime teniendo en cuenta que, a las 4:30 del Este, se conocerán los datos de producción de manufacturas en Reino Unido. Ante una recuperación de la libra, 1,6950 y 1,6975 son las resistencias a seguir.
El yen, por su parte, frenó su recuperación en la sesión asiática del viernes, y se posiciona con sesgo bajista ante el dólar, con una figura de doble suelo en la zona de 101,40, y con una línea de cuello de dicha figura en 102, por lo que el objetivo de la misma se halla en 102,60. Antes, se ubican 101,85, 102 y 102,25 como resistencias a seguir; los soportes del cruce, 101,40 y 101,10.
Los datos a considerar durante la sesión americana del viernes llegarán de Canadá: la medición de la creación de empleo del mes de abril tendrá la palabra, y moverá en forma decisiva al loonie, que últimamente trata de defender la barrera de 1,10; su quiebre, podría significar una baja del mismo en el corto plazo.