El dólar cae en todos los frentes, en una continuación del movimiento que se inició el miércoles a la tarde, producto de los anuncios de política monetaria de la Reserva Federal.
La presidente de la institución, Janet Yellen, dejó en claro, una vez más, que la intención de la Fed es la de no incrementar los tipos de interés, por el momento en mínimos de entre 0 y 0,25% desde diciembre de 2008, toda vez que evaluó que las variables que podrían generar modificaciones no se han movido lo suficiente.
Cabe recordar que durante mucho tiempo, la Fed destacó que elevaría los tipos de interés cuando la tasa de desempleo se encontrara por debajo del 6,5%. Esto sucedió hace ya varios meses, pero fue entonces cuando el organismo incluyó otras variables, como el índice de inflación, por ahora lejos del 2% requerido, y también el consumo de bienes y servicios, que crece en forma débil.
La Fed también rebajó sus expectativas de crecimiento del PBI para este año, aunque sus pronósticos muestran que la medición no volverá a estar por debajo de cero en los próximos trimestres, como ocurrió en el primero.
Como quedó dicho al inicio de estas líneas, el dólar sufrió desde el momento de los anuncios un duro golpe, con el euro quebrando nuevamente la zona de 1,36, y la libra Esterlina alcanzando un nuevo máximo desde agosto de 2009, el cual a su vez podría ser vulnerado en las próximas horas, si el precio de la moneda británica supera 1,7040. En ese caso la divisa británica llegará su valor más alto desde octubre de 2008, cuando se encontraba en una dramática baja producto de la crisis financiera de ese año.
También el yen se vio beneficiado en las últimas horas, producto de la baja del dólar; su precio se ubica apenas debajo de 102, y busca 101,60 y 101,40, próximos soportes del par USD/JPY. Sin embargo, el yen no logra consolidarse para quebrar la zona de 100, lo cual a su vez generaría una reacción inmediata del Banco de Japón, que siempre busca devaluar su moneda.
Las monedas ligadas a las materias primas también crecen en estas horas. El dólar canadiense se acerca a 1,08, valor que podría ser quebrado en las próximas horas, en cuyo caso 1,0775 aparece como el soporte a seguir. El peso mexicano, ligado al igual que el loonie al petróleo, gana posiciones y volvió a bajar de 13 unidades, con un soporte inmediato en 12,97 y, más abajo, en 12,94, de cara a la sesión americana.
El dólar australiano en tanto supera la zona de 0,94, siendo esta la moneda que anticipó, como suele suceder, el movimiento del resto de las monedas líderes.
Por el lado de las acciones, la fiesta de la liquidez sigue intacta. Los índices principales de Nueva York se acercan y/o superan máximos históricos, y estiran sus rallíes, sin que por ahora se observen patrones de reversión. Todo esto, pese a que la Fed no se mostró optimista precisamente, y recortó una vez más sus planes de estímulo a la economía.
Sin dudas, el dólar seguirá en dirección bajista mientras las acciones sigan creciendo. Pero más que nunca, el futuro de estas parece estar demasiado ligado al humor del mercado, a probables tomas de beneficios a corto plazo, y muy poco a los fundamentales de las empresas cotizantes.
En el corto plazo, sin embargo, la moneda norteamericana asoma muy sobrevendida, en especial ante la libra y el dólar australiano, por lo que no extrañaría ver correcciones bajistas de sus pares.
El calendario de noticias ofrece, para las próximas horas, las peticiones semanales de desempleo como único dato de interés.