(Artículo de análisis realizado por Ranko Berich y Manuel Ortiz-Olave, analistas del equipo de Monex Europe)
EUR. Tras dejar los tipos sin cambios, toda la atención de ayer se centró en la conferencia de prensa del Banco Central Europeo. El presidente del BCE, Mario Draghi, tomó la palabra. Habló de la debilidad de los últimos datos de crecimiento en la eurozona como de un mal pasajero, de una corrección entendible al venir de unos niveles muy elevados. Draghi no dejó de repetir que el crecimiento sigue siendo robusto, y que cuenta con una amplia base.
Evitando hablar de los plazos para la normalización monetaria, Draghi dijo que el Consejo de gobierno del BCE no trató el tema de la normalización puesto que están a la espera de contar con los datos de la primera mitad del año. Pese a que el mercado ya había descontado el mantenimiento de los tipos, el euro sufrió un revés debido a que los comentarios de Draghi se apartaron más de lo esperado de la línea dura. El euro acabó con pérdidas frente a todas las monedas del G10 excepto CHF y SEK.
GBP. La libra esterlina obtuvo ayer ganancias en todos los frentes, pese a que el principal negociador de la UE para el Brexit, Michael Barnier, alegó que las declaraciones de Mark Carney de que “la UE necesita desesperadamente a la city de Londres” eran falsas. Hoy, la atención se centrará en los datos del producto interior bruto del primer trimestre en el Reino Unido, que se publicarán a las 10.30 CEST y en las que se espera que el crecimiento interanual se mantenga en 1,4% pero con una ligera ralentización del crecimiento en el trimestre hasta el 0,3% frente al trimestre anterior en que el crecimiento alcanzó el 0,4%.
Sin embargo, los datos del PIB del primer trimestre sufren un sesgo por estacionalidad, y es normal que todos los años muestren un menor crecimiento, pese a los esfuerzos de los expertos en estadística por tener en cuenta el impacto del invierno. Mark Carney volverá a hablar hoy, durante el lanzamiento del programa EconME del banco de Inglaterra a las 16.00 CEST, un programa que trata de inculcar una mayor cultura financiera en los jóvenes.
Aunque no se espera que se desvele ninguna información realmente interesante, dado que Carney ya se puso hablar inesperadamente sobre política monetaria en su última entrevista con la BBC, no podemos descartar que alguna de sus declaraciones tenga efecto sobre el mercado.
USD. El billete verde tuvo ayer un buen día, obteniendo ganancias frente a casi todas las monedas del G10 excepto frente al JPY. Tanto los datos sobre peticiones de desempleo iniciales como los de peticiones de desempleo continuadas publicados ayer por la tarde fueron más flojos de lo esperado, indicando una cada vez menor falta de margen en el mercado laboral estadounidense.
Estos datos se unen a las últimas sorpresas positivas en los datos macroeconómicos de EE.UU. Además del PIB, hoy se publicará el dato del gasto en consumo personal durante el primer trimestre, que se espera arroje un incremento de la inflación en el primer trimestre de 2018 hasta el 2,5%. El dólar podría continuar con la fortaleza mostrada durante la semana e incrementar radicalmente sus ganancias si estos datos contribuyen a aumentar la presión para que se produzca una cuarta subida de tipos.
Con respecto a la política, la canciller alemana Angela Merkel llegará hoy a Washington, en un último esfuerzo para convencer a Donald Trump de que amplíe el acuerdo previo sobre proliferación nuclear con Irán. Todo esto tras indicar en público Emmanuel Macron, el presidente francés, que Trump probablemente desecharía el acuerdo con Irán el próximo miércoles.
CAD. El dólar canadiense tuvo ayer un comportamiento mixto, perdiendo algo de terreno frente a USD y JPY. Los principales titulares canadienses se centraron en el hecho de que la ministra de asuntos exteriores, Chrystia Freeland, dejase ayer de acudir a una cumbre en Bruselas para poder continuar con las conversaciones sobre un nuevo acuerdo para el TLCAN en Washington. Altos funcionarios mexicanos comentaron que el acuerdo está cerca, pero que habrá que hacer un gran esfuerzo antes de poder cruzar la línea de meta.