Con movimientos medidos y cautelosos se desarrolla la primera sesión del mes en el mercado de divisas. El dólar, que viene de ganar con firmeza la contienda ante las monedas principales en enero, retrocede ligeramente ante el euro, el yen y en menor medida ante la libra esterlina. Sin embargo, el viernes llegó a máximos de varios años frente al dólar canadiense, el peso mexicano y el dólar australiano.
La semana que se inicia, como suele ocurrir cada mes en su inicio, es determinante para todo el período. Los datos de empleo no agrícolas en Estados Unidos le darán el marco a la semana, aunque falta mucho aún para que se conozcan. El lunes aparece como un día más tranquilo, de reacomodamiento de los mercados luego de una semana turbulenta.
Pero ya en la sesión asiática del martes vendrá la primera cifra de importancia: el Banco de la Reserva de Australia anunciará su política monetaria del mes que se inicia, con un recorte de tasa de interés esperado, que podría impulsar una baja de su moneda, el dólar australiano, en el corto plazo. El aussie viene perdiendo posiciones progresivamente en las últimas semanas, llegando a nuevos mínimos de más de cinco años prácticamente a diario.
La otra nota de importancia la está dando el petróleo. En momentos en que, contra todos los pronósticos, por la época del año que transitamos, por el fuerte crecimiento de la economía de Estados Unidos, y varios factores más, su precio debería haber sido el más alto en varios meses, cayó con mucha fuerza llegando a mínimos de más de cinco años la semana pasada; cuando el PBI estadounidense no crece como se espera, cuando lo peor del invierno del norte comienza a alejarse, recupera posiciones. Poco de oferta y demanda, mucho de factores políticos, en los que la política monetaria de la Fed no parece estar ausente.
Para el resto del día, tomando la totalidad de la sesión americana, no esperamos cambios bruscos en los precios. El euro podría seguir ganando posiciones en el corto plazo, buscando 1,14, mientras la libra esterlina tendrá mucho que "luchar", para superar 1,5050. El yen no termina de definir si podrá finalmente buscar la zona de 112 en el corto plazo, aunque todo está dado para que ello ocurra.