Como comentábamos ayer por la mañana, tocaba lunes de subidas. La justificación la encontramos ayer en el dato de ventas de viviendas de segunda mano (por encima de las expectativas). En este contexto vimos subidas generalizadas en la renta variable estadounidense. La sesión en Asia-Pacífico has estado macada por el cierre, un día más, del mercado chino y por la publicación de datos en Japón. Los datos conocidos la pasada madrugada de la economía nipona nos dejan un cierre ligeramente negativo: el Nikkei se dejó un -0,17%. Hemos conocido los datos de desempleo (se reduce ligeramente hasta el 4,1%), el dato de producción industrial (el dato preliminar del mes de abril se sitúa por debajo de lo esperado) y el dato de ventas minoristas (nos muestra una contracción también del consumo). La economía nipona no termina de dar muestras de recuperación, lo cual a fin de cuentas, afianza la idea de expansión cuantitativa por parte del Banco de Japón. La sesión comienza en el viejo continente con la publicación de datos de relevancia en Alemania: el índice GFK de confianza del consumidor alemán, que se sitúa por encima de lo esperado; y los datos preliminares de ventas minoristas de abril que caen más de lo esperado (cada vez más signos de ralentización en la economía alemana). En este contexto vemos como los mercados europeos comienzan la sesión con subidas.
Esta mañana conoceremos en Alemania los datos de empleo, que se espera se mantengan sin muchos cambios, especialmente la tasa de desempleo, y la tasa de desempleo de la Eurozona, que se espera se incremente ligeramente. También conoceremos el dato preliminar de IPC europeo, que se espera se siga relajando y se sitúe en el 1,6%. Conocidos los datos anteriores podremos aventurarnos a estimar la posibilidad de rebaja de tipos de interés por parte de BCE (un incremento del desempleo unido a una caída de la inflación abren la puerta a una relajación de los tipos de interés, lo cual se interpreta como positivo para la renta variable europea). En Estados Unidos permaneceremos atentos a la publicación de los datos de confianza del consumidor del mes de abril, que se espera se incremente ligeramente desde el 59,7 hasta el 60,8 (si mejoran las expectativas se interpretará como positivo para las bolsas y también para el Dólar). También conoceremos el índice de gestores de compra de Chicago (PMI Chicago) que nos adelanta la tendencia de los datos de ISM que conoceremos la semana que viene (se espera que mejore con respecto al mes anterior, si fuese así lo interpretaríamos como positivo para el mercado de renta variable).