Las acciones de Boeing (NYSE:BA) están teniendo un año verdaderamente extraordinario en los mercados: acumulan una ganancia de más del 70% en los últimos 12 meses, gracias a la sólida performance financiera del negocio y sus perspectivas favorables a mediano plazo.
Analizamos los factores detrás de esta performance tan atractiva de estos papeles y el potencial futuro del activo.
Ganando altura
La industria de fabricación de aeronaves cuenta con dos jugadores principales a escala mundial, ya que Boeing y Airbus (PA:AIR) se reparten más del 90% de la facturación en el mercado. Esta estructura de cuasi duopolio mantiene la presión competitiva en niveles moderados, lo cual permite que ambas compañías generen niveles atractivos de rentabilidad.
La demanda en el sector puede ser bastante volátil a corto plazo, aunque los números a largo plazo son verdaderamente alentadores. La industria transportaba 100 millones de pasajeros al año en 1960, y en el año 1987 la cantidad de pasajeros por año creció a 1000 millones. En 18 años, la cantidad se duplicó nuevamente, llegando a los 2.000 millones de pasajeros anuales en 2005. Posteriormente le tomó 7 años a la industria superar la barrera de los 3.000 millones de pasajeros al año en 2012.
En base a estimaciones del equipo directivo de Boeing, la demanda por parte de China y la India impulsará un crecimiento sostenido en el mercado, y la empresa calcula que la demanda de aeronaves se va a duplicar en los próximos 20 años.
Boeing reportó tanto ventas como ganancias por encima de las expectativas en el tercer trimestre de 2017, y la propia firma incrementó sus estimaciones de resultados para el resto del año. Lo cual es muy importante, las reservas de nuevos pedidos muestran una evolución favorable, lo cual permite pronosticar resultados saludables a mediano plazo.
La facturación de la compañía fue de 24.300 millones de dólares en el último trimestre, lo cual implica 202 unidades de aeronaves comerciales entregadas en el período, un nuevo récord para Boeing.
Las ganancias ajustadas por acción superaron las expectativas de Wall Street en 6 centavos de dólar por unidad, alcanzando los 2,72 dólares por acción en el período. Adicionalmente, el management de Boeing incrementó los pronósticos de ganancias al rango de entre 9,9 y 10,1 por acción frente a un rango anterior de entre 9,8-10 dólares por unidad.
Las reservas de la empresa se encuentran en la zona de los 474.000 millones de dólares, incluyendo 5.700 unidades de aeronaves comerciales a entregar en el mediano plazo.
Mirando hacia el futuro
Las acciones de Boeing cotizan a un ratio precio-ganancias en la zona de 24,5 veces los resultados de la compañía para el último año. En comparación, el ratio precio-ganancias promedio para las empresas que forman parte del índice S&P 500 está en niveles de 22,3. En función del ratio precio-ventas, la firma está en niveles de 1,8 contra 2,2 para las compañías en el S&P 500.
A grandes rasgos podría decirse que las acciones de Boeing cotizan a niveles de valuación que están en línea con el promedio de mercado en base a los indicadores tradicionales de valuación. Sin embargo, considerando las distribuciones de capital de la empresa, el precio de entrada luce bastante atractivo.
A lo largo de los últimos 12 meses, Boeing asignó 8.000 millones de dólares a recompras de acciones y 3.200 millones a dividendos. Considerando ambas variables, los inversionistas en el fabricante de aeronaves están recibiendo distribuciones de capital por cerca del 7% del valor de mercado de la firma. Evidentemente se trata de niveles de rentabilidad atractivos, especialmente en un contexto de tasas de interés históricamente bajas en todo el mundo.
En cuanto a la acción de precios, la vigencia de la tendencia alcista no deja demasiado lugar a dudas, ya que el activo ha marcado recientemente máximos históricos de precios en la zona de 267 dólares por unidad. En caso de un retroceso, podemos señalar posibles soportes de precios a corto plazo en el rango comprendido entre 230 y 245 dólares por unidad.
Luego de acumular retornos tan atractivos en los últimos meses, no sería para nada extraño observar un descanso de precios o incluso una moderación en la tendencia alcista en las acciones de Boeing a mediano plazo.
Otro factor de riesgo es que la compañía opera en una industria cíclica, y el negocio se encuentra expuesto a niveles considerables de regulación en todo lo que respecta a la calidad y seguridad de las aeronaves. Un incidente grave que involucre maquinaria de Boeing y afecte la vida de los pasajeros podría tener un impacto considerable sobre la compañía desde el punto de vista legal y financiero.
No obstante, las acciones de Boeing cotizan a niveles razonables de valuación, especialmente teniendo en cuenta las distribuciones de capital de la compañía. La dinámica competitiva de la industria es bastante favorable, así como también las perspectivas de crecimiento del sector.
Por supuesto que no resulta razonable esperar que Boeing genere regularmente ganancias tan atractivas como las del último año, aunque las condiciones parecen estar dadas para que el activo brinde rentabilidades adecuadas en relación al riesgo de la inversión de cara a los próximos meses.
Fuente: DIF Markets