La semana pasada se inició en medio de una gran expectativa por el discurso que pronunciaría esa tarde la presidenta de la Fed de los Estados Unidos, Janet Yellen. La mandataria destacó que lo más importante es que "la economía ha registrado un progreso considerable en los últimos años hacia objetivos de máximo empleo y la estabilidad de los precios”.
Destacó que "Si los datos entrantes son consistentes con las condiciones del mercado de trabajo y el fortalecimiento de la inflación puede avanzar hacia nuestro objetivo del 2%, como espero, aumentos aún más graduales en las tasa de fondos federales es probable que sean apropiadas y propicias hacia esos objetivos”.
Tras la exposición de la titular de la Fed, el euro se movió aquel día dentro de un estrecho rango, cayendo inicialmente hasta un mínimo del día de 1,1326, antes de saltar hacia un máximo de 3 semanas de 1,1392. Por su parte, el BCE inició el miércoles pasado su programa de compra de deuda corporativa por el que podrá adquirir deuda emitida por empresas que tengan una calificación por encima del “bono basura”. Esta operación se realiza a través de los bancos centrales de Alemania, Francia, Bélgica, Finlandia, España e Italia.
Por su parte, el presidente del BCE, Mario Draghi, recordó que “el euro se mantiene como la segunda moneda más importante en el sistema monetario internacional”, aclarando que “el declive del euro fue especialmente en el caso de las reservas de divisas y en la emisión de deuda en moneda extranjera y de los préstamos transfronterizos”. Ese mismo día la divisa de la UE alcanzó un nuevo máximo de 1,1412 dólares.
Pero la semana terminó complicada cuando el titular del BCE, Mario Draghi, dijo que Europa está en riesgo de sufrir un daño económico duradero por una productividad débil y un crecimiento bajo, destacando la afirmación de que la política monetaria por sí sola no puede poner fin a los problemas económicos del bloque. Durante la semana pasada la moneda única marcó un máximo de 1,1410 dólares y un mínimo de 1,1250, con una volatilidad del 1,4%, y al cierre del viernes pasado en New York cotizaba a 1,1251 dólares.
Argentina: debería preocupar menos el fuerte ingreso de capitales
En nuestro informe del lunes 6 comentamos que la provincia de Córdoba había emitido un bono de USD 725 millones y la Ciudad de Buenos Aires USD 574 millones, que se agregaron a los que durante mayo suscribieron por USD 250 millones la provincia de Neuquén y Mendoza por USD 500 millones. Pero el tema no se cerró, porque se esperan más emisiones de deuda de las provincias y, aunque en menor medida, de empresas, afirmándose que en lo que resta de junio podrían ingresar por aquel concepto unos USD 2.000 millones más.
En marzo ppdo. la provincia e Buenos Aires hizo una emisión de USD 1.250 millones y al no haber en ese entonces acuerdo con los acreedores, tuvo que pagar una tasa de interés de 9,37%, a un plazo de sólo 8 años. Ahora, el Gobierno de María Eugenia Vidal realizó el miércoles pasado una nueva colocación de bonos en dólares a tres años por USD 500 millones, con una tasa de interés del 5,75% y otros USD 500 millones a diez años al 7,875%, habiendo recibido propuestas por un total de 4.500 y 1.750 millones, respectivamente. Los bancos colocadores fueron Citigroup (NYSE:C), HSBC y Santander (MC:SAN) y tales los fondos se utilizarán para financiar el plan de inversión pública en infraestructura.
Cabe destacar que las emisiones de deudas en el exterior de las provincias ya superan los USD 5.000 millones en lo que va del año, esperándose que esa cifra siga aumentando en lo que resta de 2016. La totalidad de aquellos fondos todavía no han ingresado al país, razón por la que, increíblemente, aumentan las dudas y la preocupación de que ello provoque una fuerte revaluación del peso. Además, crecen las expectativas por el ingreso de nuevos fondos del exterior también de importantes inversiones de empresas locales, tal como algunas ya lo han informado, así como resultado del próximo blanqueo.
Al respecto, se sabe que el presidente del BCRA, Federico Sturzenegger, desea no emitir más dinero para poder controlar mejor la inflación y su propósito es el de mantener el equilibrio necesario para que ello no ocurra, pudiendo ser la paridad de $ 14 por dólar un valor que sería equitativo. Sin embargo, tal vez sea el momento oportuno para decidir, de una vez y para siempre, liberar el mercado de cambios para que pueda cumplir eficientemente su función equilibradora, logrando en el menor tiempo posible mostrar los atributos necesarios para funcionar en un escenario de amplitud y profundidad.
Cabe agregar que la apuesta al éxito del blanqueo se fundamenta también en la posibilidad de que una porción de los USD 192.000 millones, que según el INDEC, los argentinos tienen en propiedades y dinero en el exterior, que incluso en otros ámbitos se calcula que llegarían a USD 400.000 millones, estén dispuestos a participar en la nueva positiva etapa de crecimiento iniciada en nuestro país.
Asimismo, el Gobierno deberá contribuir facilitando los trámites y bajando razonablemente las cargas impositivas y los empresarios lograr un fuerte mejoramiento de la productividad de sus empresas para optimizar costos y calidad y poder así competir en el mundo civilizado. Y la semana concluyó con otra excelente noticia. Nuestro país fue admitido en calidad de observador por la Alianza del Pacífico, una iniciativa promovida por el Gobierno que apunta a dinamizar la recepción de inversiones, ampliar el comercio y mejorar la reputación argentina en el exterior.
Por eso Mauricio Macri asistirá a la cumbre presidencial del bloque, que se realizará el 1º de julio en Puerto Varas. Mientras, el MULC continúa accionando con su ya habitual parsimonia, pero con la ventaja de saber que está resguardado por la actuación, casi diaria, de los bancos oficiales a quienes el BCRA, increíblemente, les ha cedido la responsabilidad de intervenir en el mercado cuando éste se desequilibra.
Así, el ente monetario pudo hacerse de USD 312 millones, que agregó a sus reservas y las que, al cabo de la semana y según cifra provisoria, quedaron sumando unos USD 26.345 millones, con una ganancia de USD 385 millones. Las entidades bancarias operaron entre sí un volumen total de USD 1.910 millones, con un promedio diario de USD 382 millones, sólo un 1,3% mayor al del similar período anterior. El Banco Nación fijó el viernes su cierre vendedor del dólar transferencia en $ 13,8000, mostrando el peso en los cinco días recientes una revaluación del 0,4% y en el mes del 1,4%.