Si se esperaba un efecto negativo sobre la libra esterlina por la legislación votada el miércoles en la Cámara de los Comunes acerca del Brexit, nada de ello ocurrió. La moneda británica sigue ganando posiciones, es verdad que a ritmo lento, y si en los próximos días logra superar los máximos del mes hasta el momento -1,2705-, podría acelerar su recuperación a la zona de 1,30 sin inconvenientes.
El movimiento alcista de la libra es, en nuestra opinión, una de las mejores oportunidades de este año. Está demasiado anunciado en los mercados que la libra se desplomará sin atenuantes, y no hay mejor señal que lo obvio para tomar acción en dirección contraria. Cabe recordar que, a fines de junio, el par GBP/USD dejó un gap en 1,3645 que no fue cubierto, y que se produjo en medio de la conmoción que produjo el Brexit en los mercados.
Por otro lado, si se analiza el par GBP/JPY, se puede ver claramente como el Brexit afectó a la libra en la misma fecha. En junio, el cruce pivoteaba la zona de 157, para caer bruscamente desde el 27 de junio, y con fuerte velocidad, producto de la caída de la libra, pero también de la fortaleza del yen, que aceleró aún más con la victoria de Donald Trump en Estados Unidos.
Este efecto se vio parcialmente neutralizado en enero, pero el yen otra vez es buscado como activo de refugio, y esto ocurrirá mientras dure el clima de incertidumbre por las medidas que Trump no tomó pero insinúa tomar. Y otra vez lo anterior: cuando algo está tan anunciado, es mejor tomar la dirección contraria. Lo mejor, en este caso, es vender yenes.
Si ambas cosas ocurren, libra al alza, yen a la baja, el par GBP/JPY asoma como una de las mejores opciones a tomar, buscando de nuevo la zona de 155 como mínimo. Con el precio actual alrededor de 141/142, piense Usted cuanto hay para ganar. Claro, se trata de uno de los pares más volátiles del mercado, y conviene tomar un riesgo muy medido y acotado por un buen stop loss, acorde al objetivo buscado.
El yen no tardará en caer. Los esfuerzos del Banco de Japón (BoJ) para buscar una devaluación son evidentes, aunque no lo demuestre claramente en los comunicados de política monetaria. El cruce USD/JPY dejó el 27 de enero un gap en 115,05 que será prontamente cubierto, y es muy probable que el precio avance bastante más allá, buscando la zona de 118.
En dicho caso, la onza de oro y, en parte, el franco suizo, serán los activos a seguir, ambos al alza. La onza, claramente devaluada, tiene mucho para ganar en los próximos tiempos, y bastante menos para perder.
La duda mayor surge con el euro. En los últimos días amagó crecer y caer en la misma medida y con intervalos de muy pocas horas. Al menos para este jueves, deberá quebrar con firmeza la zona de 1,0730 para encaminarse a 1,0770 y, más arriba, a 1,0820. Pero una caída de 1,0620 lo haría trastabillar hacia la zona de 1,0590 y 1,0555, siguientes soportes.
Este jueves, la agenda incluye las peticiones semanales de subsidio por desempleo, a las 8:30 del este, y a la 1:30 pm, la presentación del Gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Mark Carney, en momentos en que el funcionario está en el centro de la escena.