Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
El dólar se vendió de forma masiva este miércoles después de que la Reserva Federal dejara muy claro que no tiene planes de subir los tipos de interés en un futuro próximo. La Fed lleva semanas hablando de paciencia pero lo ha hecho oficial eliminando de su anuncio de política monetaria la referencia a más subidas graduales de los tipos. El par EUR/USD se disparó hasta 1,15 y el USD/JPY cayó por debajo de 109 en respuesta. Es probable que tenga lugar un debilitamiento adicional durante las próximas 24 horas, cuando Asia y Europa asimilen las noticias. Éste es un gran cambio para un banco central que acaba de subir los tipos de interés en diciembre. Según las declaraciones del FOMC, sus miembros creen que, en vista de la evolución de la economía y las finanzas mundiales y las moderadas presiones inflacionarias, serán pacientes a la hora de determinar qué ajustes a los tipos de interés serán apropiados. También eliminaron la evaluación del balance de riesgo de la declaración. En su rueda de prensa, el presidente Powell de la Fed dijo que la economía está en buen estado pero admitió que el interés por subir los tipos ha disminuido. También indicó que seguramente realizarían más ajustes del balance tras los cambios de los tipos porque no quieren provocar un revuelo en el mercado. Al fin y al cabo, el mercado no creía que fuera a haber una subida este año y Powell lo ha confirmado. Cuando se publique la siguiente tanda de gráficos de puntos, incluso podríamos ver unas previsiones menos optimistas que reflejen más fielmente las expectativas del mercado acerca de que no habrá subida tipos este año.
Mientras tanto, las negociaciones comerciales no van a ninguna parte. El presidente Trump se encuentra sometido a una gran presión para llegar a un acuerdo, pero después de la demanda de Huawei, no está claro que se lo tome muy en serio. Estados Unidos y China planean mantener una o dos rondas de conversaciones antes del plazo límite del 1 de marzo.
Al mismo tiempo, los dólares canadiense y australiano fueron las monedas que mejor actuación ofrecieron. Los precios del petróleo registraron máximos de dos meses después de que Estados Unidos impusiera sanciones sobre la industria del petróleo de Venezuela. Las reservas de petróleo crudo también aumentaron menos de lo esperado y las reservas de gas disminuyeron. Hemos observado cómo el petróleo tocaba fondo a corto plazo pero, si se interrumpen las negociaciones entre Estados Unidos y China, el precio del crudo podría seguir bajando. El par USD/CAD se situó por debajo de 1,32 y se quedó a 8 puntos de sus mínimos de 2019. Las cifras del PIB de noviembre se publican este jueves y el descenso del crecimiento que esperamos podría detener el repunte del dólar canadiense. El dólar australiano se disparó tras la publicación de unos datos de inflación mejores de lo esperado. Aunque el crecimiento de los precios al consumo se ralentizó en términos anuales, el descenso fue menor de lo esperado gracias a la subida del 0,5% del crecimiento trimestral. El Banco de la Reserva dijo que el siguiente movimiento de los tipos será al alza y este último informe respalda su optimismo.
No fue una sorpresa que la confianza de la eurozona disminuyera, pues los mercados descienden y el crecimiento se debilita. Los precios al consumo de Alemania también descendieron un 0,8%, lo que sitúa la tasa interanual en el 1,4%, su cota más baja desde febrero del año pasado. Es difícil encontrar razones para el fortalecimiento del euro aparte del debilitamiento del dólar estadounidense. Técnicamente, el repunte del par EUR/USD por encima del nivel de 1,1450 abre la puerta a un repunte aún mayor hacia 1,1550 pero los datos del jueves sobre el mercado laboral de Alemania y las cifras del 4T del PIB de la eurozona no beneficiarán a la moneda. Según el PMI, el crecimiento del empleo ha descendido hasta su cota más baja desde diciembre de 2016 y el crecimiento ha sido escaso.
La libra también ha ganado posiciones tras el debilitamiento del dólar pero descendió con respecto a las demás monedas principales pues se acaba la cuenta atrás para Theresa May. A menos de 60 días de que el Reino Unido abandone la Unión Europea, May tiene dos semanas para encontrar una mejor alternativa para la cuestión de la frontera con Irlanda. May prometió al Parlamento la oportunidad de tomar el control del Brexit el 13 de febrero si ella no conseguía hacer progresos significativos en la revisión del acuerdo. Los miembros del Parlamento quieren que May retome las conversaciones con la Unión Europea para cambiar los términos de seguridad de la frontera irlandesa. Por desgracia, la UE, Irlanda y otros países han rechazado abiertamente la propuesta de renegociación; May está en contacto con Bruselas con la esperanza de hacerlos cambiar de opinión pero no lo consigue, su única opción es conseguir que el Parlamento apoye una versión ligeramente revisada del actual acuerdo de salida. De cualquier manera, las próximas dos semanas serán peliagudas para la libra y creemos que el riesgo para la divisa es a la baja, particularmente frente a los pares.