Observamos la formación de un gartley armónico con implicaciones alcistas en el cruce entre el dólar y el yen japonés, que busca soportes sobre los 82.25 yenes, 78.6 Fibo de la onda XA precedente.
A pesar de la consolidación que vemos en el cruce los últimos días, seguimos apostando por la fortaleza del billete verde. En el corto plazo, mientras no rompa la zona subrayada de color amarillo, el giro al alza podría llevarnos a objetivos sobre 82.58 y 82.80 yenes.